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Desde chico se supo que se destacaría en el deporte. Jalen Suggs es de esos deportistas a los que cualquier deporte que se les presente por delante serán buenos. En su caso, el actual base de Orlando Magic pudo haber jugado en la NFL tan bien como lo hace en la NBA.

Tal es así que viene de una familia exitosa en ambos deportes. Su padre fue estrella en High School y su primo Rickey se destacó en la década de los 80, fue segundo en el premio Mr. Basketball y jugó en la liga de futbol americano de Canadá. A su vez, su primo segundo Terrell fue mejor jugador defensivo de la NFL en 2011 y también ganó dos Super Bowl, y su primera Reina juega en la NCAA.

Jalen desde que nació estaba destinado al deporte y a los ocho años ya jugaba al fútbol americano. A los 13 empezó a jugar al básquet y a los 15 se probó en la Universidad al fútbol americano. El entrenador no lo conocía, pero quedó encantado con su talento y solo tomó un día para que le ofrecieran un lugar.

En el equipo estatal fue una de las figuras del fútbol americano y fue considerado un prospecto de cinco estrellas, buscado por las mejores universidades del país.

Pero el básquet no lo dejó de lado y también fue una de las figuras. Cuando estaba en séptimo grado lo llamaron para el equipo y llegó al campeonato estatal tres años consecutivos. Terminó su paso como el jugador con mayor cantidad de puntos en la historia de la Minnehaha Academy.

Terminada la temporada senior, fue declarado Mr. Basketball y Mr. Football del estado de Minnesota. Como para dar una idea el tremendo talento del joven Suggs.

En enero de 2020, Suggs debió elegir y terminó decidiendo por la Universidad de Gonzaga para seguir su sueño de llegar a la NBA. En su única temporada, llevó al equipo a la final con un triple sobre la chicharra en semifinales frente a UCLA.

Elegido en el quinteto ideal de la Conferencia West Coast y mejor debutante, Suggs decidió presentarse al Draft y fue elegido por Orlando Magic en la quinta posición.

20 años y un talento desbordante que lo llevó a ser de los mejores, no solo en el básquet sino también en el fútbol americano. El futuro es todo suyo y no tardará en ser una de las próximas estrellas de la NBA.