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Las declaraciones de Daryl Morey no son de ahora, sino de hace dos meses. Las dijo en el podcast "Rights to Ricky Sánchez", y quizá no se le dio demasiada trascendencia, pero tuvo algunas frases de alto impacto, teniendo en cuenta su historia personal con el juego, sobre todo con el lanzamiento de tres puntos. Ç

Morey, lo sabemos, es un estudioso, y como tal, podríamos decir que fue el gran impulsor del aprovechamiento de las matemáticas y las estadísticas avanzadas para, sobre ellas, sostener y armar un sistema de juego. En Houston, donde fue general manager casi 15 años, desde 2007 hasta el año pasado, cuando dejó la franquicia para asumir en Philadelphia Sixers. 

Morey fue el gran impulsor del juego basado en el tiro de tres puntos, y llegó al extremo de crear, junto con Mike D'Antoni, el small ball, con todos jugadores de dos metros o menos, que pudieran lanzar triples y cambiar en cada pick, pero la burbuja de Orlando fue su tumba, con el fracaso de ese sistema y la salida tanto de él como de Harden (la figura simbólica que lo representaba), y el propio D'Antoni. 

En el podcast, Morey se mostró, paradójicamente, casi en contra del tiro de tres: "A muchos no les gusta el tiro de tres puntos en el básquetbol y los entiendo. Pienso igual. Pero el punto es que, cuando lo reglamentaron, justamente le dieron a ese tiro un valor de 3 puntos. Hoy en día, para ganar el anillo, hay que que usar esa herramienta a un nivel muy alto. Lo que pienso es que el triple vale demasiado". Contundente. 

Este año, como en todos los 10 anteriores, en la NBA, hubo más tiros de tres que nunca. Para Morey, eso es lógico, pero va contra el juego, por lo que piensa que la NBA va a hacer algo al respecto en los próximos años, aunque no sabe bien qué. "Si tienes a Joel Embiid y Ben Simmons, e incluso a Tobias (Harris), que es un jugador de élite tirando de 5 metros, todavía puedes ganar de esa manera, pero es muy raro. Hay muchas más personas que pueden disparar triples abiertos que los que pueden ser eficientes a 5 metros o en la pintura. Entonces, es una ventaja demasiado grande, ¿verdad? Querían el triple para que los pivotes tuvieran más espacio y obtener así un juego más dinámico, lo cual ha funcionado, pero simplemente le dieron demasiado valor. Deberían ser dos puntos y medio, quiero decir, ese debería ser el tope".

Morey, además, confía en un cambio, sobre todo en tiros como el triple del corner: "El tiro de 3 de las esquinas es insólito. Es como un tiro cercano al aro o uno medio sin defensa. A ver, me encantaría que se reformulen los estadios, se hagan las canchas más grandes y se aleje el tiro de tres puntos, pero eso llevará 25 años".

¿Será la NBA capaz de revertir una forma de jugar que ha crecido vertiginosamente en los últimos 15 años para provocar otra revolución? Si hay alguien que pueda, por innovadora y por capacidad económica, seguramente la NBA lo es.