Será una semana muy exigente para el equipo vasco, dado que viajará el jueves a Israel para enfrentar a Maccabi Tel Aviv y posteriormente (el domingo para ser más exactos) recibirá a Gipuzkoa por la Liga ACB. Esta situación, junto con el mal momento general de un equipo equipo que acumula tres derrotas consecutivas, genera que no haya tiempo que perder desde hoy mismo comenzaron los entrenamientos en vistas a este par de partidos. Pato Garino no ha podido debutar, como así tampoco Jordan McRae, dos figuras importantes dentro de la rotación de Prigioni, algo frustrante sin dudas.
Quizás estas cuestiones fueron las que provocaron la reacción de Pablo Prigioni ante Fuenlabrada, que ha dado la vuelta a todo el planeta del básquet y ha sorprendido mucho: fue descalificado por doble falta técnica cuando estaba por terminar el tercer cuarto del partido por increpar de mala manera a los árbitros. Esta mañana habló con la prensa antes del entrenamiento del equipo, se hizo cargo y dejó totalmente clara su postura, en declaraciones recolectadas por Gigantes:
“¿Qué puedo decir? Llegué a un punto de partido en el que estaba bastante frustrado por lo que estábamos haciendo en la cancha y me pareció que había que hacer algo porque el equipo no reaccionaba. Fue un poco forzado, pero si no reaccionan después de esto no me iba a quedar con los brazos cruzados viendo cómo el equipo se caía. Obviamente estamos tocados por los últimos tres partidos, por la manera en que estamos compitiendo. Puedo aceptar que nos falte tiempo de entrenar juntos, muchas cosas. Pero si uno juega con corazón, con espíritu, si uno compite, es diferente. Se puede perder un partido porque los otros equipos también juegan, porque llevan un tiempo jugando juntos como nos ha tocado en esta primera parte de la temporada: equipos un poco más rodados que nosotros y es entendible algunas cosas, pero tenemos que competir más. Mi esencia como jugador fue luchar, competir y jugar con mucho carácter y muchos cojones, entonces no me gusta ver que el equipo no muestre esas cosas. Nos podemos equivocar en la ejecución de una acción, es normal que nos pase al principio de la temporada, pero no me gusta ver al equipo que juega a remolque, que no luche y por momentos en el partido de Fuenlabrada no luchábamos. Entonces quizá eso fue demasiado para mi paciencia y por eso la reacción y por eso intentar buscar la manera de que el equipo se despierte. Te pueden pitar una técnica y ya te frenas pero yo no sólo quería una técnica, quería dos. El mosqueo es por lo que estábamos haciendo la pista. Con todo el respeto para Fuenlabrada creo que somos mejor equipo. Creo que ellos tienen un gran equipo y un gran entrenador pero creo que somos mejor equipo y no lo estábamos demostrando, no estábamos compitiendo contra ellos. Y esto es lo que a mí me molestó. Estamos jodidos todos. Los jugadores también están jodidos. No es una cuestión de que no tienen actitud, están tocados por un inicio duro, las expectativas nuestras eran mucho mejores, de todos, y lo estamos sufriendo y espero que ese sufrimiento, esa bronca la utilicemos para ir para arriba y convertirnos en un equipo serio, sólido y hay veces que los equipos se construyen así, con golpes. Y los estamos recibiendo todos juntos. Lo de ayer obviamente tenían un propósito. Me disculpé con los árbitros, me disculpo, no era nada contra ellos, pero había que hacer algo para que el equipo despertara. He visto a grandísimos entrenadores hacerlo y yo que no soy un gran entrenador me pareció que era el momento oportuno de hacer algo y lo hice y no se va a ver eso todo el tiempo”.
