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Este sábado se anuncieron los 11 miembros de la clase 2017 que entraron al Naismith Hall of Fame, destacándose nombres como del Tracy McGrady y Bill Self, entre otros. Sin embargo, uno de los datos más curiosos pasó por alguien que llamativamente nunca llegó a jugar profesionalmente en Estados Unidos (sí a nivel NCAA), pero que igualmente será inmortalizado en dicho país: el griego Nikos Galis.

Galis, de enorme carrera a nivel FIBA,  se transformó en apenas el sexto jugador en ingresar al Naismith, sin haber jugado nunca a nivel NBA. El griego pasó toda su carrera en su competencia nacional, principalmente con el Aris y en menor medida con el Panathinaikos.

¿Quiénes son los otros cinco referentes FIBA en el Olimpo de la NBA? El brasilero Oscar Schmidt (2013), el bosnio Drazen Daligapic (2004), el italiano Dino Meneghin (2003), el croata Kresimir Cosic (1996) y el ruso Sergei Belov, primero en conseguirlo allá por el año 1992.

Por supuesto que varios otros jugadores extranjeros también integran el Salón de la Fama, como es el caso de Drazen Petrovic, Sarunas Marciulionis, Dikembe Mutombo, Yao Ming y Arvydas Sabonis, entre otros, pero todos ellos tuvieron sus pasos por la liga más importante del mundo. No así el griego Galis, más allá de alguna vez haber estado cerca de sumarse a los Boston Celtics (fue drafteado en 1979).