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San Antonio vuelve a salir fortalecido de la lotería del Draft. Aunque los Mavericks acapararon los titulares al quedarse con el pick 1 y el derecho a elegir a Cooper Flagg, los Spurs se llevaron un premio igualmente valioso: la segunda selección global. Ese activo, sumado al pick 14 también en su poder, coloca a la franquicia texana en una posición de privilegio para definir su rumbo inmediato: continuar con su proceso de desarrollo o acelerar los tiempos con una superestrella.

El nombre que suena con más fuerza es el de Giannis Antetokounmpo. El griego, que estaría valorando seriamente su salida de Milwaukee según reportó Brian Windhorst (ESPN), ve con buenos ojos los proyectos de Houston y San Antonio. En el caso de los Spurs, el pick 2 podría ser la llave para abrir negociaciones formales: Dylan Harper, el base de Rutgers que lidera varias proyecciones, representa un perfil ideal para iniciar una reconstrucción en los Bucks.

Con Victor Wembanyama como eje del proyecto, y la llegada reciente de De’Aaron Fox, los Spurs cuentan con un núcleo joven con proyección, pero al que aún le falta ese componente de experiencia y jerarquía para competir en lo más alto. Giannis, campeón en 2021 y dos veces MVP, podría ser el socio ideal del francés. Además, San Antonio dispone del espacio salarial necesario para absorber su contrato sin comprometer otras piezas clave del plantel.

Todo indica que el verano en Texas será caliente. Mientras Houston también se mantiene expectante con activos interesantes y una gran temporada reciente, los Spurs juegan con una ventaja difícil de ignorar: un pick 2 que puede significar un presente ganador. Si la gerencia texana decide mover sus fichas, Antetokounmpo y Wembanyama serán un dúo tan difícil de escribir como de vencer.