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Las conexiones entre jugadores y sus equipos suelen darse desde la infancia, pero eso generalmente es en clubes de América o de Europa. En este caso, Nikola Jokic estuvo conectado por las casualidades de la vida desde los cinco años con los Nuggets, a través de un regalo.

Luego de haber renovado su contrato con Denver, Misko Raznatovic, el representante de la estrella serbia, compartió una foto donde se lo ve al pivote con un buzo de la franquicia. A su vez, contó la llamativa, y emotiva, historia.

“¡Cuento corto sobre el destino! Se trata de Nikola Jokic, doble MVP de la NBA, con unos cinco años de edad en su ciudad natal de Sombor, Serbia. En el año 2000, cuando se tomó esta foto, llevaba una sudadera de los Nuggets, no porque le encantara el baloncesto o porque supiera de los Nuggets, sino porque la recibió como regalo”.

Y se explayó luego en lo que son las casualidades y el destino: “Las posibilidades de que un niño de un pequeño pueblo serbio tuviera una sudadera de un equipo estadounidense menos conocido en el año 2000 eran mínimas (a menos que estemos hablando de clubes famosos como los Lakers o los Bulls). Las posibilidades de que alguien supiera sobre los Nuggets en un pequeño pueblo serbio eran casi nulas”.

Por último, cerró su relato hablando del esfuerzo y lo que trabajó Nikola para ayudar a ese destino: “Pero las posibilidades de que ese mismo niño creciera para jugar al básquet y alcanzar su mejor nivel profesional, ganar dos títulos de Jugador Más Valioso y firmar un acuerdo histórico con el mismo club cuya sudadera usó a los cinco años, eran cero. Es cierto que los ganadores crean su propio destino, hacen posible lo imposible y escriben las páginas de la historia a través de una dedicación excepcional, trabajo duro, sacrificio, confianza y voluntad de hacer más que los demás. Pero a veces, un poco de destino juega un papel importante en el resultado general”.