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La NBA sumó otro capítulo a su larga lista de polémicas arbitrales, esta vez en el cierre del duelo entre Milwaukee Bucks y Charlotte Hornets. En un partido ajustado hasta el final, los árbitros sancionaron una falta inexistente de Giannis Antetokounmpo sobre LaMelo Ball, quien, según admitieron más tarde, simplemente tropezó solo. “Durante el partido vimos un contacto ilegal, pero al revisarlo después, notamos que no hubo falta”, reconoció Curtis Blair, jefe del equipo arbitral. Los tiros libres otorgados a Ball sellaron el 115-114 a favor de Charlotte, dejando a los Bucks en una racha de frustración y malos resultados.

La reacción de Doc Rivers no se hizo esperar. El entrenador de Milwaukee, enojado por la decisión, criticó duramente la inconsistencia arbitral: “Son dos partidos seguidos con errores en la última jugada. LaMelo se cayó, nadie lo tocó, pero nos sancionan igual. Este tipo de cosas no pueden pasar al final de un partido”, sentenció en conferencia de prensa. Rivers también se quejó de un desequilibrio en los tiros libres, señalando que los Hornets lanzaron 21 por solo 11 de los Bucks: “Giannis estuvo en la pintura toda la noche y solo tuvo un tiro libre. ¿Cómo se explica eso?”.

Más allá de los arbitrajes, el panorama para los Bucks es desalentador. Con un balance de 4-9, el equipo parece lejos de ser el contendiente al título que se esperaba tras la llegada de Damian Lillard, quien se perdió su tercer partido consecutivo por una conmoción cerebral. Giannis sigue siendo la piedra angular del equipo, sumando un triple-doble con 22 puntos, 15 rebotes y 12 asistencias, pero falló el tiro decisivo para ganar. Sin Khris Middleton y con un plantel sin cohesión, los problemas ofensivos y defensivos se acumulan, dejando a Milwaukee como uno de los equipos menos efectivos de la liga en aspectos básicos como rebotes ofensivos y puntos recibidos en transición.