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El rival más grande en la actualidad de Boston, Jimmy Butler, estuvo cerca de vestir su camiseta en el pasado. El ex presidente de los Celtics, Danny Ainge, reveló recientemente que había querido adquirir a Butler durante mucho tiempo, pero nunca sucedió. En 2011, los Chicago Bulls seleccionaron a Butler como el número 30 del draft. Lo que nadie sabía en ese momento es que Ainge también tenía los ojos puestos en él, pero nunca concretó la jugada.

Ainge también habló sobre la posibilidad de haber intercambiado por Jimmy Butler antes de que Jaylen Brown y Jayson Tatum fueran seleccionados por Boston. Si el intercambio se hubiera concretado, Brown y Tatum podrían haber estado vistiendo hoy el uniforme de los Bulls o de otro equipo, como los Nets, dueños originales de esas selecciones.

Ainge dijo: "Algunos de los mejores intercambios fueron los que no pude hacer. Estaba tratando de conseguir a Jimmy Butler de Chicago cuando estaba en Boston, pero ellos pedían mucho. Así que no lo hicimos. Y habría sido Jaylen y Jayson, ambas esas selecciones del draft", reveló el actual presidente de operaciones de Utah Jazz.

En el 2011, Jimmy Butler se unió a los Bulls. A medida que diversificaba sus capacidades ofensivas, su influencia en las filas de Chicago se hizo más evidente. Su aptitud para anotar, combinada con su tenaz destreza defensiva, lo catapultó al rango de un destacado All-Star en 2015. En 2019, el camino de Butler lo llevó a Miami Heat, un equipo conocido por su énfasis en la determinación. Aquí encontró el entorno perfecto para mostrar su liderazgo y su incansable ética de trabajo.

Durante las Finales de la NBA de 2020, Butler dejó su nombre grabado en la historia con una serie de actuaciones icónicas, incluido un memorable triple doble de 40 puntos que impulsó al Heat a una victoria en el Juego 3. El notable viaje de Jimmy Butler desde un entorno desfavorecido hasta convertirse en una superestrella genuina de la NBA es un testimonio de su incansable ética de trabajo y determinación.

Por el otro lado, la vida y carrera de Jayson Tatum y Jaylen Brown podría haber sido muy distinta. De haber sido elegidos por Chicago en 2016 y 2017 a cambio de Butler, se iban a encontrar en una situación menos competitiva que el Boston de 2018, pero hubieran tenido “su equipo” mucho tiempo antes, dado que Derrick Rose fue traspasado a New York y Jimmy hubiera estado en Boston.

De seguir juntos ambos fuera de los Celtics, quizás la franquicia hubiera moldado el plantel para favorecer sus capacidades, pero está más que claro que en Boston encontraron un emparejamiento ideal, que ya los llevó a unas Finales de la NBA y amenazan con quedarse el título en los próximos años.