Basquetplus.com

Stephen Curry nos acostumbró, a lo largo de toda su carrera, a mantener una gran constancia, y que el hecho de que tenga malas actuaciones sea algo raro. Esta temporada no venía siendo de las mejores para el hábil tirador de los Warriors, quien, en el encuentro contra los Memphis Grizzlies del pasado jueves, jugó un muy mal partido. Sin embargo, a los pocos días, recuperó un grandísimo nivel.

Primero vamos a repasar la peor versión de Steph. Los Golden State Warriors se enfrentaron a los Memphis Grizzlies por 144-93. El marcador final, con una diferencia de 51 puntos, representa la cuarta peor derrota en la historia de la franquicia de Golden State, pero la actuación individual de Curry añade una capa de dramatismo al encuentro. El letal tirador desde larga distancia apenas sumó 2 puntos, ambos desde la línea de libres, fallando sus siete intentos de campo, incluidos seis triples. Este registro marca la primera vez en su carrera que Curry no anota un solo tiro de campo en un partido en el que disputó al menos 12 minutos.

Ahora vamos a ver al Curry que nos tiene acostumbrados para observar las grandes diferencias entre un juego y otro. Si el Chef está bien, los Warriors están bien, y por eso le ganaron a los Minnesota Timberwolves por 113 a 103. Curry finalizó con un magnífico doble-doble de 31 puntos y 10 asistencias. Mantuvo un 47.6% de efectividad en tiros de campo y tiró 7 de 16 en triples, una puntería mucho más certera. También se complementó con 10 asistencias, lo que muestra que en este encuentro estaba mucho más metido. Finalmente, queda repasar el +/-: contra los Grizzlies fue de -41 y contra Minnesota, cuando Curry estuvo en cancha, los Warriors ganaron por 20.