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Miles Bridges hizo su regreso a la NBA después de estar fuera durante 583 días debido a su participación en un caso de violencia doméstica en 2022. Cuando finalmente ingresó al juego de ayer, el alero recibió una recepción conflictiva por parte de la multitud local de su equipo, con una mezcla de festejos y abucheos mezlcados.

A pesar de la abrumadora derrota de los Milwaukee Bucks por 130-99 contra los Charlotte Hornets, el jugador de 25 años, quien anotó 17 puntos en 33 minutos de juego en el esfuerzo perdido, argumentó que simplemente estaba feliz de estar de vuelta en la cancha.

"Fue genial", dijo Bridges. "Como dije, extrañaba a estos hinchas. No sabía qué esperar, y ellos me extrañaban. Estaba simplemente feliz de salir allí y poder jugar. Sé que perdimos el juego, pero fue bueno jugar frente a la gente nuevamente", aclaró el jugador.

Miles fue acusado por su novia de estrangulamiento y abuso físico. Se presentó una demanda en julio, pero evitó la cárcel al declararse no culpable de los cargos de violencia doméstica a principios de este mes. La franquicia de Charlotte anunció que se sentían "cómodos" al dar la bienvenida de nuevo a Bridges, quien se perdió toda la temporada 2022-23 y los primeros 10 juegos de la temporada actual.

A partir de ahora, todo indica que el jugador estará bajo las órdenes constantes de Steve Clifford, quien lo tendrá en un papel importante para la rotación tras haber jugado 33 minutos en su debut y sin duda lo hará parte del núcleo del equipo en el resto de la campaña.