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La relación entre Jayson Tatum, Jaylen Brown y Steve Kerr volvió a tensarse en San Francisco, esta vez con un contundente mensaje sobre el parqué. Los Boston Celtics humillaron a los Warriors 125-85, una diferencia de 40 puntos que recordó viejas heridas abiertas por el entrenador de Golden State durante el pasado verano. Kerr, como seleccionador del Team USA, relegó a Tatum a un rol secundario en los Juegos Olímpicos de París y dejó fuera a Brown tras la baja de Kawhi Leonard, decisiones que no han sido olvidadas por las estrellas de Boston.

Tatum, con 22 puntos, 9 rebotes y 7 asistencias, y Brown, que aportó 17 puntos en una actuación eficiente (8/14 en tiros), lideraron el vendaval celta, especialmente en el tercer cuarto, donde aplastaron a los Warriors con un parcial de 43-24. Pero el duelo no terminó en el marcador. En una escena que resumió el conflicto, Brown evitó interactuar con Kerr tras el partido mientras Tatum charlaba con Stephen Curry. Aunque Tatum eventualmente saludó al entrenador, el gesto frío de Brown dejó claro que no ha perdonado su exclusión del equipo olímpico.

📹 Great awkward Steve Kerr moment at the end of the game pic.twitter.com/xYp6xRvL0j

— Joe Giza (@JoeGiza) January 21, 2025

La tensión tiene raíces profundas. Tatum fue marginado a 17.7 minutos por partido en París y, en los dos enfrentamientos contra Serbia, ni siquiera pisó la cancha. Brown, por su parte, acusó al cuerpo técnico de Team USA de ignorarlo por razones extradeportivas, vinculando su exclusión a críticas previas contra Nike. Estos conflictos volvieron a salir a la luz en una noche en la que los Celtics no solo dominaron en la cancha, sino que expusieron públicamente su resentimiento hacia Kerr.

Mientras tanto, los Warriors, afectados por las bajas de Draymond Green, Jonathan Kuminga y Kyle Anderson, no fueron rival para el campeón reinante. Curry, con 18 puntos y un 4/12 en triples, se vio solo, mientras que jugadores como Andrew Wiggins (4 puntos, 1/11 en tiros) y Buddy Hield (6 puntos, 1/4 en triples) apenas contribuyeron. Sin embargo, la verdadera historia de la noche fue la reivindicación de Tatum y Brown, quienes dejaron claro que, más allá del resultado, todavía tienen asuntos pendientes con Kerr.