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Ser entrenador de cualquier deporte profesional no es para cualquiera. La exigencia que tiene el cargo hace que los que lo ejecutan vivan en permanente estado de situación límite en lo emocional y, por ende, en su estado de salud. Por eso, los que se destacan, merecen un reconocimiento especial por el camino recorrido. 

Estudiando la historia de los entrenadores de la Liga Nacional, nos encontramos con un caso particular en Sebastián González. El cordobés, ahora en Quimsa, antes en San Martín de Corrientes, viene consiguiendo marcas que, sospechábamos, pocos habían logrado antes, y nos llevamos una sorpresa al analizarlas. 

Si tomamos como inicio la campaña que lideró con San Martín de Corrientes en la 2016/17, e incluimos esta parte de la 2021/22, llegamos a un número que solamente una vez antes, en toda la historia de la Liga, un coach pudo sostener durante 6 temporadas consecutivas. González terminó la 16/17 con 44-20, la 17/18 con 40-17, la 18/19 (única negativa) 21-22, la 19/20 (inconclusa), ya en Quimsa, con un impactante 18-3, la 20/21 con 36-10 y ahora marcha primero con 9-3. 

Si sumamos todas esas cifras, llegamos a un récord global de 168 ganados y 75 perdidos, con un porcentaje de triunfos del 69.1%. Nadie en la historia, salvo uno, pudo conseguir en ese período de tiempo una marca semeejante. Y no es difícil acertar quién. Sí, Sergio Hernández en Peñarol, entre 2007 y 2013, no solamente ganó 4 títulos de Liga y varios otros locales e internacionales, sino que metió una marca de 228-99, un 69.7% de triunfos. De hecho, Oveja es el único entrenador en la historia en sumar 40 o más triunfos en 4 años consecutivos (2008/09 a 2011/12). 

Obviamente, hubo otros períodos exitosos de entrenadores, como los de Luis Martínez en Ferro, Walter Garrone y Rubén Magnano en Atenas, Julio Lamas entre Olimpia y Boca y entre Ben Hur y Libertad, Mario Guzmán en Independiente de Pico, Néstor García en Boca, el propio Hernández entre Estudiantes de Olavarría y Boca, o Gonzalo García entre Gimnasia y San Lorenzo, pero ninguno pudo alcanzarlo durante un período tan prolongado. 

Quizá la curiosidad de la marca de González es que no pudo conseguir ningún título de Liga, pese a esos números. Llegó a dos finales, pero cayó en ambas contra San Lorenzo: 2017/18 con San Martín y 2020/21 con Quimsa. Y el año en el que mejor estaba (2019/20), la Liga se suspendió por el Covid. Igual, no se puede quejar: ganó la primera BCLA, el Súper 20 del año pasado (también el del 2017 con SM) y jugó una Intercontinental ante el Burgos español. Ahora marcha otra vez como gran candidato al título. Veremos si esta vez completa la rueda.