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El básquet está lleno de historias, muchas de esas inusuales, extrañas y si bien hay varias que se conocen, hay tantas otras que aún no tenemos noción que existen. Por ejemplo, tras la medalla de plata ganada por Francia en los Juegos Olímpicos de París 2024, salió a la luz un dato completamente desconocido.

Francia tuvo un torneo espectacular, se metió en la final ante Estados Unidos y estuvo muy cerca de romper la hegemonía de las norteamericanas y cortarle una racha ganadora impresionante. Pero, finalmente, las americanas sacaron adelante un partido muy complejo y ganaron los Juegos Olímpicos por octava vez consecutiva.

El seleccionado local tuvo a una jugadora que fue una de las grandes estrellas del certamen. Gabby Williams, la alera que jugó en Fenerbahce la última temporada y ahora regresó a la WNBA, es estadounidense pero tiene la nacionalidad francesa. La perimetral terminó el torneo con registros de 15.5 puntos, 4.8 asistencias y 4.7 rebotes, siendo una de las jugadoras más determinantes.

Gabby tuvo un acercamiento con los Juegos Olímpicos mucho antes de su última presencia en París 2024 y lejos de ser el básquet el deporte que practicaba. Durante su adolescencia, Williams se destacó en salto en alto. Fue dos veces campeona estatal y con apenas 17 años, quedó en la quinta posición para participar de Londres 2012. Si bien era muy joven para formar parte del equipo estadounidense, quedó como suplente.