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La disputa legal entre Luca Vildoza y su exclub Baskonia sumó un nuevo capítulo. El Juzgado de lo Social número 1 de Vitoria-Gasteiz dictó una sentencia que establece que el base argentino deberá pagar un millón de euros al club vasco por incumplimiento de contrato, en lugar de los dos millones que pedía Baskonia. Este fallo se origina en su regreso a Europa en 2022, cuando fichó por el Estrella Roja de Serbia, sin la compensación pedida por Baskonia, que mantenía sus derechos en el continente europeo.

Baskonia tenía con Vildoza una cláusula de rescisión que ascendía a dos millones de euros, una cifra que no fue abonada cuando el jugador decidió unirse al equipo serbio. Según el club, la contratación de Vildoza por el Estrella Roja se realizó "sin contar con la participación ni el consentimiento de Baskonia", lo que derivó en una serie de reclamaciones legales, que ahora han sido tan favorables para el club vasco, que se llevó un millón de euros, como para Vildoza, que se terminó ahorrando otro millón. 

Por eso, el club aún no está satisfecho, ya que considera que el monto dictado es inferior a lo pactado originalmente. En este sentido, Baskonia anunció que recurrirá ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco para exigir el pago completo de los dos millones de euros estipulados en el contrato. Así, la batalla judicial entre ambas partes continuará, con la posibilidad de nuevos fallos en los próximos meses. Como señala Relevo, la situación sigue sin resolverse por completo, y los capítulos de este litigio podrían extenderse aún más.

La realidad es que, desde 2022, Villdoza jugó en Estrella Roja, Panathinaikos y ahora Olympiacos, consiguiendo altos contratos, sin tener que abonar esa cifra pedida por el Baskonia. Aunque todavía falta la resolución judicial final, por ahora Vildoza ha salido bien parado. No se puede decir lo mismo del club, que en su balance del 2023 ya había incluido los 2 millones del juicio como cobrados, y ahora deberá rehacer todo de nuevo ante el fallo judicial. Encima, el balance les había dado unos 50.000 euros a favor y ahora le dará al menos un millón en contra, si vuelven a contar un dinero que igualmente todavía no les ingresó.