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La trágica muerte de Diogo Jota, delantero del Liverpool, sacudió al mundo del deporte. El futbolista portugués, de 28 años, falleció junto a su hermano André en un accidente automovilístico ocurrido en una autovía en Zamora, España. Según los primeros reportes, un reventón de neumático habría provocado que el Lamborghini en el que viajaban saliera de la ruta, impactara y se incendiara. La noticia conmovió a figuras de distintos ámbitos, entre ellas LeBron James, estrella de la NBA y accionista minoritario del club inglés, quien expresó su dolor a través de las redes sociales.

“¡Mis oraciones están con sus seres queridos en este momento! ¡Que todos estén guiados y protegidos!”, escribió LeBron en su cuenta de X (ex Twitter), y cerró con un mensaje que conmovió a los hinchas del Liverpool: “¡YNWA JOTA!”, en alusión a “You’ll Never Walk Alone”, el histórico himno de los Reds. El vínculo del basquetbolista con el club se remonta a 2011, cuando adquirió el 2% de la institución a través del Fenway Sports Group. Desde entonces, James no solo ha sido inversor, sino también embajador de la marca y colaborador en iniciativas comerciales.

Jota había llegado a Liverpool en 2020, tras destacarse en el Wolverhampton. Formado en el Paços de Ferreira, también pasó por el Porto y el Atlético de Madrid. En Anfield se convirtió en una pieza clave del ataque y uno de los jugadores más queridos por la afición. Su inesperado fallecimiento, además de golpear al mundo del fútbol portugués, dejó un vacío en el vestuario de los Reds.