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Carlos Alocén, base del Gran Canaria, atraviesa un nuevo calvario tras confirmarse la rotura del ligamento cruzado de su rodilla derecha. La noticia llega menos de tres años después de una lesión similar en la rodilla izquierda, que lo mantuvo casi dos años fuera de las canchas mientras militaba en el Real Madrid. En medio del golpe emocional, Alocén se expresó con sinceridad en redes sociales: "Me duele porque me sentía especialmente bien y estaba siendo una etapa muy feliz de mi vida y de mi carrera. Mentiría si dijera que no estoy algo descolocado, un poco triste y con algo de rabia".

A pesar del contexto adverso, el joven de 24 años mostró su determinación de superar el desafío. "Me recuperé una vez. Me costó, pero me recuperé. Pienso dar todo de mí para volver a hacerlo una segunda vez", afirmó con entereza. Alocén, quien se incorporó al Gran Canaria este verano tras desvincularse del Real Madrid, había comenzado a mostrar destellos de su talento en su nueva etapa profesional. Su ilusión de regresar se sostiene en un vínculo profundo con el básquet: "Siento que tengo muchas cosas que darle todavía al baloncesto y algo dentro de mí que me dice que al baloncesto todavía le quedan muchas cosas por darme".

Con una trayectoria marcada por su calidad como base y su carácter resiliente, Alocén sigue siendo una de las mayores promesas del baloncesto español. Su mensaje, concluyendo con un esperanzador "Nos vemos en unos meses en las canchas", deja en claro que no se rendirá fácilmente. Los fanáticos esperan verlo superar esta nueva prueba, con la esperanza de que recupere el nivel que lo llevó a ser considerado uno de los proyectos más prometedores del básquet europeo.