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No se va a fundir por una actitud como esta y ni siquiera es criticable, pero los 1.000 dólares que dejó Andre Drummond de propina en un restaurante de la Florida este domingo llamaron la atención de todos, sobre todo de la camarera del lugar, Kasandra Díaz. 

La señorita declaró que no sabía quién era el comensal hasta que vio el volumen de la propina que le había dejado. Recordemos que en muchos sitios, cuando se paga con tarjeta de crédito, se permite agregar en un ítem la propina elegida. 

En este caso, en una cuenta que sumaba 164 dólares, una propina de 1.000 no tenía lógica, pero así pasó. "Cuando me devolvió la cuenta, fui a cargar la información para cerrar la mesa del monto de la propina y cuando ví no podía creerlo. Me caían las lágrimas de felicidad", contó Kasandra a ESPN.

Drummond, que ganará 27 millones de dólares este año por su contrato con los Cavs, solo le dijo que "gracias a tí por ser tan incréible". Difícil de interpretar sus palabras. La cuestión es que el restaurante Che!!! Restaurant (así se llama) publicó en su cuenta de Instagram el ticket para que quedara la prueba.

Los restaurantes de la Florida abrieron hace dos semanas al 25% de la capacidad por las medidas de seguridad y es la segunda vez que ocurre un hecho así. Antes fue el jugador de la NFL, Chad Johnson, que también dejó 1.000 dólares de propina en una cuenta de 37.