Serbia tuvo la mejor noticia posible de cara a los dos últimos partidos clasificatorios de la Copa del Mundo FIBA 2019: Milos Teodosic jugará contra Estonia e Israel, y con un triunfo conseguirán el objetivo que llevan persiguiendo dos años.
"Jugaré esos dos partidos y terminaré la temporada", dijo el jugador de 31 años tras unirse al campus de entrenamiento de la selección. "No jugaré el resto de la temporada, mi plan es recuperar la forma de cara a la próxima temporada a lo largo del verano con la selección nacional. Ahora descansaré, trabajaré en mi juego y luego me prepararé con el equipo nacional para la próxima temporada".
"Siempre estoy encantado de jugar con el equipo nacional. Realmente estoy muy orgulloso y me encantará ayudar al equipo a al menos ganar un partido. Es lo que necesitamos para estar en la Copa del Mundo".
El base tuvo experiencias memorables en la Copa del Mundo FIBA de 2010, cuando anotó una canasta sobre la bocina para vencer a España en los cuartos de final.
Estuvo incluso más impresionante cuatro años más tarde en España cuando lideró a Serbia a la Final.
Así que no es de extrañar que quiera tener otra exitosa participación en la Copa del Mundo con el equipo nacional y jugando con ellos obtener el mejor estado de forma posible para fichar por un club la temporada próxima.
Pero para conseguir los objetivos, Serbia necesita conseguir un triunfo más en dos partidos. Un partido fuera de casa en Estonia es el primer encuentro y luego tendrán en casa otra oportunidad midiéndose ante Israel.
Y ese día habrá una oportunidad para los aficionados de Belgrado de disfrutar de su magia por última vez en la temporada.
"Creo que los chicos que han llevado el peso en estos clasificatorios se merecen un Pionir lleno, no por mi presencia. Va a ser un partido extremadamente importante y espero que la gente venga".
El seleccionador Sasa Djordjevic no podía reprimir una sonrisa al anunciar que Teodosic estará con el equipo, pero espera que "Milos no celebre mucho el cumpleaños de su hija".
Jugadores como Marko Simonovic explicaron que Serbia mejora al menos un 30% con el regreso del base, pero el que fuese jugador del año FIBA en Europa no siente una presión adicional por su retorno.
"Estoy acostumbrada a ello. No es nada nuevo. Es importante que nos centramos en los dos próximos partidos para alcanzar nuestros objetivo. No estoy en buena forma, pero pienso que tengo suficiente energía y fuerza para esos dos partidos".
Serbia se mide con Estonia en Tallinn el jueves ante de centrarse en el último partido de la campaña contra Israel el domingo. Con Teodosic a bordo, el mítico Aleksandar Nikolic Hall vivirá una nueva noche inolvidable noche en la historia del baloncesto serbio.