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El caso del asesinato de George Floyd por parte de la policía de Minneapolis es el centro de las noticias de los Estados Unidos por estos días, y bastante tiene que ver la exposición que le dieron figuras claves del deporte, como LeBron James o Steph Curry. 

Ayer, le tocó a Steve Kerr salir a la escena para dejar clara su postura en relación a Donald Trump, con el que lo une una fuerte enemistad desde que el empresario llegó a la Casa Blanca a comienzos de 2017. "Trump dijo en 2017 que los jugadores de la NFL que se arrodillaban pacíficamente como protesta por la brutalidad policial eran unos hijos de puta. Ayer, Trump dijo que los que protestaban en Minneapolis eran matones. Por eso creo que los racistas no deberían estar habilitados para ser presidentes".

Un día antes, Kerr había publicado otro tuit en respuesta a uno de Trump donde el presidente de los Estados Unidos decía: "No hay nada que prefiera hacer más que deshacerme de mi cuenta de Twitter". Kerr fue burlón y escribió: "HAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHA!!!!!!!!!!!!".

La historia viene de largo, aunque se incrementó en los últimos tiempos. En marzo pasado, Kerr ya había acusado a Trump de racista y en octubre de 2019, el presidente se había burlado tanto de él como de Popovich, diciendo que "hablan mal de Estados Unidos, pero cuando hablan de China, no quieren decir nada malo. Pensé que era bastante triste, en realidad. Kerr incluso parecía asustado cuando lo decía, estaba temblando". Continuará.

Thank you @PabloTorre for the perfect text. In 2017 Trump called kneeling NFL players who peacefully protested police brutality ‘sons of bitches.’ Last night he called Minneapolis protesters ‘thugs.’ This is why racists shouldn’t be allowed to be president. https://t.co/klcg8TeCDK

 

— Steve Kerr (@SteveKerr) May 29, 2020

HAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHA!!!!!!!!!!!! https://t.co/R4LaQ4rUDQ

— Steve Kerr (@SteveKerr) May 28, 2020