NBA

Shaq, Barkley y el recuerdo de su famosa pelea

13:01 17/05/2020 | En la temporada regular de 1999, los dos internos que actualmente forman parte del mismo programa de televisión se trenzaron en una pelea que provocó la expulsión de ambos. Un repaso a esa noche.

Barkley y O'Neal, disputando una pelota. (Foto: Getty Images)

Shaquille O’Neal y Charles Barkley han sido dos de los mejores internos en la historia de la NBA. Su capacidad para dominar la pintura les permitió ser la pieza principal de sus equipos y destacar por sobre la gran mayoría de los “grandotes” de sus épocas. Actualmente, son amigos y compañeros en el programa Inside the NBA de TNT. Sin embargo, en 1999 protagonizaron una pelea que los mandó a ambos a las duchas antes de tiempo.

Ocurrió en un partido entre Houston Rockets y Los Ángeles Lakers durante la temporada regular. En un ataque de estos últimos, Barkley recibió la pelota en la pintura y se dispuso a anotar ante la defensa de O’Neal. El de la franquicia angelina lo frenó con una falta y, no contento con eso, lanzó un manotazo y un empujón casi al mismo tiempo. Sir Charles, reconocido por ser un abonado a ese tipo de acciones, redobló la apuesta: le tiró un pelotazo directo a la cabeza. Shaq lo encaró directamente y ambos cayeron al suelo.

Mientras sus compañeros se encargaron de separarlos, los dos continuaron atacándose verbalmente. Finalmente, el árbitro decidió echarlos y tuvieron que irse de la cancha por el mismo pasillo. “Estaba haciendo todo esos movimientos de mon para echarme del partido y creo que le funcionó. Debí haber sido más inteligente y buscarlo más tarde”, confesó el de los Lakers tiempo después.

En una entrevista de 2018 en el programa Scoop B Radio, Barkley dio su opinión sobre lo sucedido: “No iba a dejar que me ridiculice enfrente de 18.000 personas. En cierto punto, tienes que plantarte y enfrentarlo. Igualmente, me alegró de que nadie haya salido herido porque es un gran amigo y colega.” La actualidad los encuentra como rivales en los graciosos cruces que se dan en la pantalla. Esta vez, con micrófonos de por medio y sin la fiereza de otros tiempos.


 

Compartir