Obras Basket 84 - San Lorenzo 88
San Lorenzo superó una durísima prueba para defender su invicto este viernes. En el Templo del Rock y ante un Obras que le planteó un inteligentísimo partido durante media hora, el Ciclón llegó a estar 17 puntos abajo pero fue despertando con el correr de los minutos y sobre el final ganó 88-84. Obras no lo supo cerrar bien y los de Boedo aprovecharon, de la mano de un Gabriel Deck fenomenal que lideró la remontada con 26 puntos.
A puro fuego y arsenal ofensivo, Obras y San Lorenzo no se dieron tregua en el arranque del partido. El peso de Kemp no hizo efecto porque el extranjero no tuvo un buen inicio de noche, aunque Obras igual maquilló su merma de nivel con el interesantísimo aporte de Zanzottera, la conducción de Barral y la lucha de Valdelicio en el poste bajo. San Lorenzo se encontró con un inspiradísimo arranque de Justiz, que en el juego interior protagonizó un duelo tremendo con Valdelicio. Y en ese golpe por golpe ninguno se sacó diferencias: 21 iguales al terminar el primer cuarto.
En el segundo cuarto empezó a verse el primer quiebre, porque defensivamente Obras anuló a San Lorenzo y le cortó las vías de gol. Sacando el hecho de que Justiz pesó mucho en el inicio, la realidad es que Zanzottera jugó un partido bárbaro en el fondo sin dejar jugar a Tucker, aquel que resuelve casi todo en el Ciclón. Con su as goleador sellado por la defensa, San Lorenzo se pinchó ofensivamente y Obras facturó teniendo muchas alternativas además de Valdelicio y Zanzottera. Esto último se dio porque Romano mandó a la cancha a varios de los pibes y respondieron, como Zurbriggen que hizo un bárbaro backup de Pepo Barral pero sin olvidarse del chico Valussi que también entró muy bien. Obras clavó un parcial de 30 a 15 y sorprendió, entrando al descanso 51-36 arriba con un nivel altísimo de despliegue.
Obras siguió controlando las acciones en el reinicio de las acciones, mientras en la otra vereda se pudo observar un San Lorenzo que no solo estaba apagado sino también ofuscado y hasta fastidioso. Se veía en los gestos de Gonzalo García y en la frustración del Penka. Pero había que cambiarle el chip a los de Boedo, y tal vez eso empezó a verse poco a poco en la efectividad que tuvo desde la línea (casi perfectos en los libres y con Deck asomándose como figura) más las embestidas que provocó para cargar la defensa de Obras. Los de Romano sintieron la salida de Barral (lesionado en una jugada contra Mata durante el primer tiempo), tuvieron al tridente Zanzottera-Valdelicio-Zurbriggen pero San Lorenzo se le puso a tiro: 70-62 al entrar al último periodo.
En el tramo final, esa embestida que había empezado a simular San Lorenzo tomó mayor forma. Los de Boedo se pusieron a solo una posesión en un par de minutos (70-67 con 7m por jugar), y eso ante un Obras que se pinchó notoriamente adelante fue determinante. Obras perdió volumen ofensivo e incluso desperdició las chances que tuvo desde los libres, esa ausencia de Barral seguramente también lo condicionó, porque ante un San Lorenzo con miles de variantes era difícil de contrarrestar. Ahí, en esa embestida, la inteligencia y verticalidad de Deck para sacar faltas y llegar al aro fue decisiva, emergiendo como el gran protagonista de la remontada azulgrana. Un triple de Mata puso a San Lorenzo con ventaja de 77-75, volviendo a liderar el score después de mucho tiempo y a 4 minutos del final. Ahí se terminó de desordenar el dueño de casa, que no encontró rumbo y le abrió el camino a un San Lorenzo que lo fue sentenciando con Deck hasta el 88-84 definitivo.
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