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El receso por fin de año puede traer varias novedades en San Francisco. San Isidro analiza posibles cambios en el plantel y los mismos están referidos a la zona de internos, donde el equipo de Daniel Beltramo anhela tener mayores alternativas por lo que ya empezó a barajar qué modificaciones pueden producirse.

La realidad es que el equipo necesita cubrir la vacante que se generó tras la lesión de Rodrigo Alvarez, cortado a principios de diciembre debido a una seguidilla de tres lesiones que demandarán un largo periodo de recuperación (la última dolencia que sufrió fue un desgarro con desprendimiento en la inserción del aductor de la pierna izquierda). Si bien lo importante es buscar un reemplazante para el puesto de ala pivote, posición natural de Alvarez, la poca variedad de jugadores nacionales en el mercado puede obligar a que los cordobeses tomen otros cambios.

En esta probabilidad de modificación extra que existe aparece la chance de que el pivote extranjero Dwight McCombs sea cortado y que San Isidro contrate otro foráneo. McCombs, que regresó a su país en este receso de la competencia, está notificado de esta posible variante que se plantea aunque si no surgen cambios deberá presentarse en San Francisco el próximo 2 de enero, cuando el plantel dirigido por Beltramo regrese a los entrenamientos.

“Si conseguimos un ala pivote nacional, que sería el reemplazante natural de Alvarez, no haremos otra modificación extra, pero si llegamos a encontrar un pivote nacional sí cambiaremos a McCombs y buscaremos un ala pivote extranjero”, explicó el presidente de San Isidro, Alejandro Aimaretti, en diálogo con Básquet Plus.

Pasando en limpio, todo dependerá de qué suceda con el reemplazante de Alvarez: si es un pivote nacional entonces McCombs dejará el equipo para que San Isidro contrate un ala pivote foráneo, si es un ala pivote nacional no se modificará la estructura y McCombs seguirá siendo el centro extranjero de los Halcones Rojos.