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Más allá de la derrota de su equipo por 120-108, Manu Ginóbili jugó un partidazo contra los Warriors, terminando con 21 puntos anotados en apenas 17 minutos en cancha. Aún con 39 años, el bahiense no deja de romper récords y dejar en los libros de historia de la NBA un legado que será imborrable.

Entre las marcas que consiguió este sábado, una sobresale: se transformó en el segundo jugador en superar los 20 puntos con 39 años (o más), en una final de conferencia. ¿El único otro que lo había conseguido hasta el momento? Kareem Abdul-Jabbar, quien lo logró en ocho ocasiones distintas. La liga ha tenido un sinfín de leyendas, pero solo Manu y Kareem consiguieron semejante actuación a esa edad y en esa instancia de la temporada.

Otro de los datos que destacan la noche de Manu, lo deja directamente en soledad: sus 21 puntos son la mayor cifra conseguida por un suplente en playoffs, jugando con 39 años o más. Nunca nadie había anotado tanto en ese contexto.

Noches como estas solo alimentan aún más un sentimiento generalizado y quizá egoísta de nuestra parte: ojalá no estemos viendo los últimos partidos de una figura irrepetible en la historia del deporte argentino. Si es por nivel, está claro que todavía tiene muchísimo para dar. Incluso ante rivales como Golden State y en el punto más caliente de la temporada.