Basquetplus.com

La noche de miércoles nos trajo la trágica noticia del fallecimiento de la esposa de Gregg Popovich. La organización de los Spurs dio a conocerla a través de un comunicado y de inmediato la NBA se unió en sentimientos y palabras de apoyo hacia uno de los entrenadores más icónicos y respestados de la liga, así como también hacia su familia. Las franquicias de la NBA escribieron en sus redes sociales un mensaje de respaldo y enviaron sus condolencias.

En tanto, entre los jugadores, la reacción fue la misma. LeBron James se enteró en vivo de la noticia, en el marco de la entrevista televisiva posterior al triunfo 100-97 sobre los Pacers y fue sin duda un golpe bajo. "Soy un gran fanático de Pop. Me encanta Pop. Una tragedia así. Mis mejores deseos para Pop y su familia. Son noticias devastadoras. La familia de la NBA... todos nos mantenemos unidos. Compite cada noche, pero algo así pone todo en perspectiva", fueron las palabras del Rey, absolutamente shockeado.

Kevin Durant también se enteró por los periodistas, pero en este caso luego del entrenamiento de los Warriors en el AT&T Center: "Solo quiero que Pop sepa que toda la familia de la NBA lo está apoyando para que pueda superar el difícil momento por el que atraviesa. Es más grande que el juego. Es más grande que ganar y perder. Se trata de la hermandad que construimos como jugadores de la NBA y todos los miembros de la familia de la NBA. Me siento tan mal por Pop y su familia. Es algo difícil de escuchar".

Esta clase de gestos no hacen más que destacar el valor humano de Gregg Popovich y su familia. No solamente es uno de los entrenadores más exitosos de la NBA actual, sino que también uno de los más queridos. Ni hablar de su profesionalismo, ya que aún sabiendo que a su esposa le quedaba poco tiempo, emprendió el viaje a San Francisco para estar con su equipo en el inicio de los playoffs.