NBA 2017/18

La dura historia de Bobby Portis, el agresor de Nikola Mirotic

12:57 18/10/2017 | Con 15 años se interpuso entre su padre golpeador y su madre. Luego todo fue incertidumbre, hasta que el básquet salvó su vida y la de los suyos.

Bobby Portis tiene 22, 2.11 metros de altura y una personalidad muy particular, fruto de lo que le ha tocado vivir en su niñez. El ala pivote, que fue seleccionado por los Bulls en el puesto 22 del Draft 2015, nació y creció en Little Rock, una de las zonas más duras de Arkansas. Su entorno estuvo plagado de violencia, en donde era un hecho usual que su padre borracho golpeara a su madre. En estas horas es noticia por haber mandado al hospital, con conmoción cerebral y fracturas maxilares, a su compañero Mirotic.

Para entender este suceso, también hay que comprender su difícil historia de vida. Con apenas 15 años, él mismo cortó con ese círculo vicioso al interponerse entre sus padres y detener a su progenitor, que a su vez había querido agredirlo.  A partir de ese momento comenzó otro calvario, ya que con su madre y sus tres hermanos menores empezaron a vagar en refugios y departamentos. El hambre, la precaridad, dolían y el básquet era un bálsamo ante todo aquello.

El exjugador Corliss Williamson, así como el entrenador Marcus McCarrol, fueron sus mentores en aquellos tiempos duros en donde la rabia de Portis estaba a flor de piel. Rabia contra su padre, contra los problemas que atravesaba su familia, contra todos. “Tenía mucha ira. Estaba enfadado. Me lo decían hasta los árbitros antes de los partidos. Me pedían que lo controlara”, comentaba McCarroll. 

Finalmente pudo encauzar su ira hacia el mayor desarrollo posible de sus habilidades como jugador de básquet, ya que sabía que esa era una forma con la que podría salir y sacar a su familia de una situación desesperante. Llegó a la Universidad de Arkansas y no desaprovechó la oportunidad, aunque mantuvo su forma de ser, tal como comentó Anderson, su coach de aquel momento: “Tenía hambre. No se achicaba ante nadie, tenía y tiene un motor que yo nunca había visto en nadie. No se dejaba llevar por los halagos, solo quería mejorar, hacerse más fuerte para él y para su familia”.

Portis todavía no pudo explotar en la NBA y esa impotencia quizás también haya sido un factor de influencia en el altercado con Mirotic, aunque nada justifica esta clase de comportamientos. Se confirmó oficialmente por la franquicia de Illinois que el ala pivote será suspendido por ocho partidos, mientras que Nikola Mirotic será baja entre 4 y 6 semanas para Chicago. Un mal comienzo, aún antes de empezar.

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