Lábaque: "Me propuse divertirme y lo estoy haciendo"
16:09 02/04/2015 | El base de Atenas cuenta cómo cambió el chip para encarar esta temporada a los 37 años. Es pieza clave del equipo y brilló en el triunfo ante Obras.
Bruno es la manija de Atenas. (LNB.com.ar)
Atenas viene de lograr uno de esos triunfos que valen doble, por el rival de turno y por lo que puede generar para lo que viene. La victoria de anoche en la casa de Obras, líder del Sur, le puede dar un envión importante para la recta final del año.
Bruno Lábaque fue gran responsable del festejo ante el Tachero con sus 15 puntos, 7 asistencias y enorme sabiduría para controlar el juego. Y también es responsable del buen andar de los cordobeses en la 2014/15. A los 37 años, el base está teniendo una temporada bárbara (12.2 tantos, 4.7 pases gol y 2.9 rebotes de promedio en casi 29 minutos) y marca la diferencia con su calidad e inteligencia pese a que las piernas ya no son las mismas del pasado. Básquet Plus habló con Bruno para analizar lo que dejó el duelo ante los de Núñez, el presente personal y del equipo, y lo que viene de cara a los playoffs.
-Imagino que están más que contentos por la victoria de anoche, en una cancha difícil y ante uno de los mejores de la Liga como Obras...
-Sí, sin dudas. Le ganamos a uno de los mejores de la temporada y que va primero en su zona. Para nosotros era una parada clave porque si bien hicimos buenos partidos ante los equipos que están arriba, no habíamos podido ganar. Por suerte nos llevamos un partido que nos hacía falta.
-¿Qué es lo que más rescatan de anoche, al margen del resultado?
-Hablamos después del partido y lo que primero destacamos es que se jugó con la actitud que mostramos en nuestra remontada, la que vino después del flojo arranque de temporada. Cuando recuperamos camino fue por nuestra concentración. En los últimos dos juegos no la tuvimos y nos metieron más de 90 puntos. Sabemos que gol tenemos y siempre aparece uno distinto, pero lo que había que mejorar era la agresividad en defensa, colaborar más el uno con el otro. Y eso se vio ayer. A la hora de atacar tuvimos paciencia ante un rival que no te perdona, que tiene grandes jugadores y a uno de los mejores técnicos y estrategas en el banco (Julio Lamas). Sabíamos que si podíamos tomar el ritmo del juego y llegar a un final cerrado, la presión iba a ser para ellos. Y por suerte nos quedamos con el triunfo.
-¿Qué es lo que les falta para terminar de encontrar regularidad? Tuvieron esa gran racha de ocho victorias, después perdieron ante rivales de arriba por muy poco, luego tuvieron dos juegos flojos como me decías y ahora ganaron en la casa del puntero del Sur.
-Lo que nos está faltando es regularidad en la concentración y agresividad en defensa, no relajarnos y pensar que porque metemos 80 puntos podemos dejar de lado la defensa. Cuando logramos defender y en los últimos cuartos nos meten menos de 20 puntos, siempre nos quedamos con los partidos. Estamos teniendo muchas desconcentraciones ahí. Al ser un plantel largo tenemos que ser más inteligentes, jugar mucho más al límite y dejar la vida, sabiendo que cuando estamos cansados puede entrar otro compañero con la misma agresividad y actitud. Eso nos está faltando, nos relajamos fácil. Y en esta Liga y ante rivales duros, eso no se perdona.
-¿Sentís que a veces el equipo depende mucho de vos? Se nota una diferencia importante cuando estás en el banco, sobre todo en el control del juego.
-Yo creo que este equipo no depende de ninguno, sino de que todos estemos en conjunto, tanto a la hora de atacar como defender. En ataque tengo la responsabilidad de manejar los tiempos como cualquier base. No soy tonto, sé que soy importante en este esquema. Pero los chicos a los que le ha tocado reemplazarme, ya sea Alvaro Merlo pese a su corta edad o Luciano González, lo han hecho bien. No me gusta decir que el equipo depende de mi. Sí sé que soy importante, pero como también lo son los demás chicos.
-Al margen de la dependencia, ¿cómo te estás sintiendo este año en una Liga que quizás para los más veteranos como vos pasa factura por el desgaste físico?
-Me estoy sintiendo muy bien, teniendo una temporada buena en lo personal porque me propuse divertirme. Uno sabe la edad que tiene y esa responsabilidad que siempre tuve en mi carrera, ya sea de ser el hijo del máximo dirigente o de estar al lado del ídolo máximo como Marcelo Milanesio. Siempre me pasaba que los partidos no terminaban cuando lo hacían para cualquiera, porque me ponía a hablar con mi viejo o más gente y me medían de otra manera. Este año me propuse divertirme. Hice un gran trabajo en la pretemporada, empecé un mes y medio antes, y le prometí a mi gente cercana que iba a divertirme. Creo que lo estoy haciendo. Juegue bien o mal me divierto, no me hago más historia de la que corresponde. Si bien me gusta ganar, soy fanático del club y juego a muerte cada partido, no dejo de divertirme adentro de la cancha, arriesgando un poco más o con ese tipo de cosas. Así me divierto yo y sé que le puede ser mucho más útil al equipo.
-Ahora entiendo por qué vemos más lujos de tu parte...
-Eso dicen, jaja. En realidad siempre fue mi juego, lo que pasa que cuando vas haciendo tu camino tratás de hacer lo que le sirve al equipo y era tonto de mi parte buscar hacer otra cosa que no correspondía. Pero cuando fuimos campeones con el Huevo Sánchez también arriesgaba. Quizás esa soltura o diversión que me propuse hace que arriesgue un poco más.
-Imagino que este triunfo llegó justo para afrontar de otra manera la recta final, justo cuando se les vienen varios partidos en Córdoba y pelean por estar ahí entre los cuatro. ¿Qué buscan para esta última parte?
-El objetivo es entrar entre los cuatro primeros. Tenemos que aprovechar que ya pasó esa vorágine de los partidos de visitante y tenemos cinco partidos seguidos de local. Nuestra idea es estar en el cuarto o tercer lugar, porque el 1 y el 2 (Quimsa y Regatas) es prácticamente imposible. Hoy por hoy tenemos esa lucha, queremos asegurar el primer cruce de local y ahí ver con quién nos toca. Sabemos que unos cuartos de final pueden ser para cualquiera. No escapamos de la responsabilidad y sabemos que tenemos equipo para estar arriba y muchos jugadores con experiencia en playoffs, que es una linda ventaja. Apuntamos a eso y el partido de ayer nos dio un envión anímico muy bueno, porque nos medimos ante un gran equipo y pudimos hacerlo de igual a igual.
-En este nuevo formato de Liga, ¿cuánto puede jugar en la etapa final que ustedes no tengan extranjeros?
-Creo que no va a influir. Yo me siento cómodo jugando con nacionales, que conocen la Liga. Yo no conozco en la historia de la Liga que un americano te saque campeón. Voy al ejemplo de los últimos dos campeones, Regatas y Peñarol, donde la mayor responsabilidad fue de Paolo Quinteros o Leo Gutiérrez. Si bien los extranjeros son importantes, nunca los veo como desequilibrantes o que te van a llevar solos a salir campeones. El que lo hace es el equipo, y si es de nacionales mucho mejor, porque la comunicación y el día a día se hace más ameno. Nosotros dependemos de los que estamos.
Leandro Fernández / [email protected]
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