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La Unión tuvo este martes, quizá, su partido más redondo de la temporada y superó sin mayores problemas a Bahía Basket. Luego del encuentro, hablamos con una de las figuras del equipo de Guillermo Narvarte, Alejandro Konsztadt.

- Me parece que es un triunfo importante por muchos factores: por ser contra Bahía, por lo bien que jugaron, por hacerlo de local, porque no venían bien...

. Seguro, creo que la victoria tiene todos esos condimentos. El rival, el estar en casa, el hacerlo de una manera contundente, todo eso nos repercute en el estado de ánimo. En volver a confiar en nosotros, en el de al lado. Porque en los momentos que no estás bien, te aparecen inevitablemente dudas. Pero todo lo venimos hablando, no había que quebrarse, porque tampoco era un momento trágico. Le pasa a casi todos en 56 partidos. Pasaba por reponerse lo más rápido posible y ayer lo conseguimos.

- ¿Cómo se hace para salir con la agresividad con la que salieron a jugar el partido, cuando traían un presente complicado y con varias derrotas?

. Creo que no es algo automático, porque sino lo hubiéramos hecho antes. Es algo que se trabaja, no solo en la cancha, sino hablándolo, planteando cuál es la situación y el punto de vista de cada uno, para poner un objetivo común. Detectar el problema. Eso fue lo que hicimos. Por suerte nos dio resultados y nos sentimos cómodos. Contra San Lorenzo también entramos agresivos y tuvimos un buen primer tiempo, con mucha defensa. Pero no lo supimos mantener a lo largo del partido y eso nos pasó en muchos juegos de la temporada. Ayer fue algo para destacar eso, porque si bien tuvimos dos minutos que nos anotaron en el segundo cuarto, a lo largo de todo el partido fuimos contundentes, agresivos y con un objetivo claro. Ese es el camino.

- ¿Lo más difícil de conseguir en esta Liga es esa constancia en la contundencia?

. La regularidad es lo más difícil. Un partido bueno lo tienen todos. Y te digo bueno, más allá del resultado. De estar enfocado, de estar en la misma sintonía, de estar agresivo. No depende de meterla o no, o de hechos más fortuitos. El estar presente y competitivo en todos los juegos, no puede faltar. Quien logra eso en una temporada de 56 partidos, son los que se destacan.

- Más allá de ser otra temporada, ¿lo vivido el año pasado los ayuda un poco a desdramatizar el mal arranque?

. Seguro, creo que la situación se puede tomar de dos maneras. Sacarle jugo a lo positivo, sabiendo que se puede revertir una situación mala, sobre todo faltando poco más de media temporada. Pero también es otra campaña, otro equipo y no tenemos que vivir de lo que ya pasó. Ahora es otro momento, porque sino nos cargamos con una mochila y cuando perdés te vuelven los fantasmas. Es otro momento, otro equipo, no hay situaciones iguales. Sí saber que aunque tengas un día malo, hay que volver a trabajar, porque en dos días jugás de nuevo. Hay que revertir la historia y lo principal es lograr esa regularidad de ser competitivo todos los días. Después los resultados llegan solos.