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Nikola Jokic fue una de las primeras superestrellas contagiadas de Coronavirus en este proceso de retorno de la NBA. Pero, para fortuna de los Denver Nuggets y de la competencia en general, ya ha dado negativo en dos testeos recientes y está libre de la enfermedad. Sin embargo, el tiempo que le demandaron los chequeos le ha hecho perder el vuelo que la franquicia tomó para viajar a la burbuja de Orlando, en donde se reactivará la competencia.

El pivote serbio llegó a Denver tras ser testeado en su país de origen y las complicaciones que existen en Belgrado para poder moverse hacia otros territorios debido a la pandemia también jugaron en contra de su llegada a suelo estadounidense. Allí, debió pasar por otros dos testeos que le impidieron unirse a la comitiva de los Nuggets. Ahora, deberá trasladarse de manera particular para cumplir con los protocolos de sanidad exigidos por la organización.

Jokic es uno de los internos más completos y dominantes que ha tenido la NBA en las últimas dos temporadas. Fue parte del último All-Star Game y tiene una importancia gigantesca en el funcionamiento de su equipo, que se ubica en la tercera posición de la Conferencia Oeste. Cuando logré arribar a Florida, será una gran noticia para los dirigidos por Mike Malone.