Howard: "No soy un cáncer dentro del vestuario"
00:09 16/07/2016 | El pivote habló en su llegada a Atlanta Hawks y aprovechó la oportunidad para defenderse de la mala reputación que sostiene en la NBA.
Dwight Howard es una de las nuevas caras que tendrá Atlanta Hawks para la próxima temporada de la NBA. El pivote decidió cambiar de aire y dejó Houston Rockets para firmar con la franquicia de Georgia por tres años a cambio de 70.5 millones. Sin embargo para Howard este ha sido más que una mudanza de equipo, sino que también es una buena oportunidad para renacer en su ciudad natal.
El jugador de 30 años firmó su convenio durante los últimos días y dejó un par de frases interesantes, con la intención de limpiar una imagen que ha venido siendo manchada desde hace varios años. Desde hace algunas temporadas se ha tildado a Howard como un jugador conflictivo dentro de los equipos, desde su situación tirante con Stan VanGundy en Orlando hasta los cruces que sostuvo con Kobe Bryant en Los Angeles Lakers y la poca química con James Harden en Houston Rockets.
Por eso el centro aprovechó su presentación en Atlanta para referirse a esa reputación, dejando en claro que es un tema que lo incomoda demasiado con el simple hecho de escucharlo rumorearse.
"La única cosa que realmente me molesta escuchar es que soy un cáncer dentro del vestuario y que soy un tipo que quiere dividir a sus compañeros. Nunca he sido así en toda mi vida. Siempre he sido alguien que une a la gente, ya sea mis compañeros, a la comunidad, a mi familia y demás. Solo escuchar esa palabra, 'cáncer', me molesta, porque para ser honesto, no lo soy. Siempre he sido alguien que se preocupa por sus compañeros de equipo. Escuchar 'cáncer', 'diva' o cosas por el estilo, ese no soy yo", explicó en una entrevista para ESPN.
Obviamente Howard también habló de su llegada a los Hawks, dejando en claro que se ha renovado y quiere ser protagonista con su equipo. Además reveló que la incidencia de Grant Hill ha sido importante para todo esto. "El (por Hill), Wes (Wilcox) y Budenholzer son todos chicos que creyeron en mí y eso me dio mucha confianza. Después de la temporada estaba un poco decaído. Me hicieron sentirme otra vez muy bien conmigo mismo".