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Justo antes de viajar a New Orleans para disputar el último partido de la temporada, Manu Ginóbili habló con el programa de radio Basta de Todo, en una charla sumamente interesante que dejó varios puntos a destacar. A continuación, repasamos algunas de sus declaraciones más importantes.

Sobre la definición de la Conferencia Oeste: "Una locura. Tenemos que ir, ganar y ser segundos. Así de simple. Es un año parejísimo, como siempre en esta Conferencia. En New Orleans vamos a tener que ganar para tener una ventaja deportiva hasta el final de Conferencia".

"Si me decías un mes atrás que íbamos a terminar así, te lo firmaba ciegamente y te hubiese considerado loco. Todo cambió de un día para otro", cuenta Manu sobre la reciente mejoría del equipo. "Veníamos jugando mal. Hubo un click, no sabemos quién lo hizo, ni cómo. Tocamos fondo contra New York, en un partido impresentable de visitante. Jugamos en la cancha de los Knicks, contra un equipo que ya había tirado la toalla. Y nosotros vamos con necesidad de ganar y perdemos jugando muy mal, con una actitud no ideal. Ahí estábamos en el séptimo puesto a un partido del octavo. Algo cambió, se ganaron once partidos seguidos y estamos a un triunfo de quedar segundos. Es rarísimo, pero estamos felices que haya sucedido. Estamos todos de muy buen humor".

Sobre su rol algo recudido dentro de los Spurs: "Fue natural. Es darse cuenta que todo cuesta un poco más, que estás un paso más lento, menos efectivo. Y que los que llegan nuevos, es todo lo opuesto. Hay que aceptar la realidad y tratar de ser imparcial. Hoy si la pelota está en manos de Leonard, Parker, Green o Duncan, creo que está en mejores manos que las mías, así que no tengo ningún problema con eso. Me encanta mi nuevo rol en este momento de mi vida. Por ahí hace 10 años me hubiese gustado un poco menos. Si quiero disfrutar y estar sano, es lo correcto. Lo tomo con naturalidad. En el último mes estoy promediando entre 18 y 20 minutos y me viene barbaro. Gané en calidad de vida. He logrado digerir la situación y estoy jugando una especie de suplementario".

¿Hay chances de pasar al cuerpo técnico de San Antonio, luego de su retiro? "Yo creo que sí, va a ser una posibilidad. Posiblemente se vaya a hablar. El tema es que tengo que decidir yo qué quiero. No quiero hacerlo simplemente porque esté la posibilidad. Llevo casi 20 años en el básquet y me gustaría estar un poquito de tiempo más distendido, disfrutando un poco más de mi país o viajando un poco más".

Luego, fue el turno para un capítulo que Ginóbili no termina de cerrar: la Selección. "Yo nunca terminé de decir que se terminó por todo lo que me liga a la Selección, por todo lo que viví. Soy un jugador activo y me cuesta decir que se terminó. Pero el año pasado cuando me pasó lo que me pasó, creí haber sido claro en decir que no me quería retirar así. Pero no pude decir hasta acá llegué, porque me resulta raro y no lo dije. No se si inconscientemente guardo el sueño de jugar en Río o no. Yo creo que va a ser imposible. Hay una chance muy remota, pero se ve que me cuesta sacarla del todo. Se que voy a tener 39 años. No es fácil, no creo que haya muchos atletas de esa edad. El tiempo dirá, yo se que las chances son muy remotas. Hay momentos en los que también hay que dar lugar. Veremos que sucede".

"No va a ser fácil en el tema resultados. Pero si no se dan los mismos resultados, que se puede hacer", dice Manu sobre el recambio en el seleccionado. "A veces no tenés el talento para estar arriba y no importa. Tenés que competir para ser el mejor que podés ser. El tema es comportarse de la misma manera, con los mismos valores, el mismo compromiso. Eso también es ganar en cierto modo".

Sobre la cercanía del retiro: "Somos bastantes los que pronto no vamos a estar. Fue una parte importante de la historia de esta franquicia. Pop cuando decida retirarse, Tim... a Tony quizás le queda un poco más. Va a cambiar notablemente la cara de esta franquicia y veremos que pasa de ahí en adelante".

Para cerrar, el escolta habló sobre lo que viene y la dura transición que se produce al dejar la actividad: "Muy posiblemente, nada de lo que yo haga de acá en adelante, sea similar a lo que viví o con mayor adrenalina. Eso no creo que vaya a ser fácil de asimilar a los 40 años. Pero es un lindo desafío. Todos mis planes pasan por estar rodeado de mi mujer, de mi familia. Satisfaciendo mis curiosidades. Va a ser menos adrenalínico pero trataré de vivir más el día a día con tranquilidad y disfrutándolo".