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Ewing, los Knicks y una de las grandes conspiraciones en la historia NBA

18:56 09/10/2020 | Tiene que ver con el Draft de 1985. Nueva York se quedó con el pick 1 y seleccionó al pivote de Georgetown. Dicen que todo estuvo arreglado.

Ewing al momento de su elección (Foto: NBA)

En la actualidad los exteriores son los diamantes buscados por los exploradores de las 30 franquicias de la NBA y los internos poco a poco van dejando de ser deseados. No era así en épocas anteriores, cuando los hombres grandes eran los centros de gravedad de todos los equipos que querían ser dominantes en el corto, mediano y largo plazo. 

Talentos de la calidad de Bill Russell, Kareem Abdul-Jabbar, Shaquille O´Neal o Hakeem Olajuwon, entre otros, fueron algunos ejemplos de diferentes lustros, pero similares paradigmas. Tenerlos acercaba a los conjuntos hacia el éxito y, a pesar de que había excepciones, como Larry Bird en los Celtics o Jordan en los Bulls, contar con ellos era una entrada casi asegurada a la postemporada. 

Hasta acá todo normal. Sin embargo, en el Draft de 1985 ese deseo por quedarse con el siguiente gigante dominante fue llevado a otro nivel. Y los protagonistas no son otros que los siempre polémicos Knicks de Nueva York. 

El pivote por el que todos se lamían los dedos era Patrick Ewing, que venía de la prestigiosa Georgetown University, en donde había promediado 15.3 puntos y 9.2 rebotes. Nadie lo pudo detener en la NCAA y todos sabían que sería la próxima gran estrella de una liga que necesitaba alguien de su magnitud. 

David Stern ya era el comisionado de la liga y en ese Draft por primera vez se llevó a cabo la famosa lotería. Por ende, los siete equipos que no llegaron a los playoffs la temporada pasada tenían el 14.3% de probabilidades de quedarse con el primer pick. 

Acá es cuando la cosa se pone turbia y la realidad se mezcla con la ficción para formar una hermosa conspiración. La teoría dice que las autoridades de la NBA querían que los Knicks vuelvan al primer plano y Ewing podría ser el indicado para empezar la tarea. 

En una entrevista con Sports Illustrated, Stan Kasten, gerente general de los Hawks en esa época, recordó que un ejecutivo de un equipo de la NBA le dijo con firmeza lo que iba a pasar durante un torneo universitario en Hawai: “Se va a los Knicks, todo está arreglado”. 

Los días pasaron y el sorteo llegó. Un sobre grande para cada equipo fue puesto en una gran bola de plástico transparente y se barajó el elemento antes de que Stern los eligiera. Una teoría dice que el de los Knicks tenía una esquina arrugada, a la vez que otra exclama que en un momento se congeló la esfera para que David pudiera elegir fácilmente la que quería. 

“Si la gente quiere decir que se arregló la lotería, está bien”, fue todo lo que tuvo para decir Stern en esa época. “Siempre y cuando deletreen de forma correcta nuestro nombre. Eso significa que están interesados en nosotros. Eso es fantástico”, finalizó. 

Lamentablemente, el hecho nunca se esclareció, pero ese fiasco llevó a la NBA a cambiar los sobres por pelotas de ping pong para evitar cualquier tipo de manipulación. Los Knicks tampoco hicieron comentarios, pero se puede decir que sufrieron luego, ya que hasta el día de hoy jamás pudieron volver a conseguir un título.

¿Será una maldición? Quizás... Por ahora, todo sigue siendo una gran conspiración.  

 

Ignacio Miranda/ [email protected]
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