Embiid: “Perder 4 partidos es una mierda”
14:21 04/01/2020 | El equipo que dirige Brett Brown parece ir sin un rumbo fijo cuando se acerca a mitad de la temporada y algunos jugadores están disconformes con lo que está sucediendo.
Philadelphia 76ers era uno de los grandes candidatos en la previa de la actual temporada de la NBA a ganar la Conferencia Este e intentar quedarse con el anillo ante el campeón del Oeste. Pero la realidad de los Sixers es bastante diferente.
Poseen la peor racha de la liga, cuatro derrotas consecutivas, y su sexta colocación en la tabla de posiciones, con récord de 23-14, está muy lejos de lo que el equipo apuntaba para este momento de la temporada a cuatro juegos de llegar a la mitad de la etapa regular.
El funcionamiento del equipo decayó mucho en la última semana y quedó en evidencia en el juego de anoche con los Rockets, el cual terminó con derrota por 118 a 108, en el que Harden se lució con un triple doble de 44-11-11. Si bien los puntos altos del equipo fueron Embiid y Simmons, ambos consideran que el equipo atraviesa un momento pésimo.
"Perder cuatro partidos es una mierda, y no parece que estemos mejorando", expresó muy enojado el interno camerunés luego de la derrota. Y agregó con más énfasis: "Es frustrante. Me importa ganar y esto me está afectando. Todo lo que me importa es ganar. Tenemos que encontrar una manera de hacerlo".
Por su parte, el base Ben Simmons intentó poner paños a la situación y repartir las responsabilidades en partes iguales con el resto del equipo. "Tenemos que estar más concentrados en la cancha. No podemos estar tan lejos los unos de los otros. Tenemos que ser un equipo", reflexionó el australiano que llegó en 2016 al equipo de Philadelphia.
Notas Relacionadas
Joel Embiid, el chico que siempre soñó con jugar en la NBA
Sanción con sabor a poco para Embiid y Karl Anthony Towns
El coach de Philladelphia no temió en comparar a Embiid con Shaquille O´Neal
Butler, sobre su salida de los 76ers: "Hay cosas que simplemente no funcionan"
Phoenix bajó a Philadelphia y la NBA se quedó sin franquicias invictas