El Legado: conocé a los 10 mejores prospectos de 1999
12:17 11/02/2018 | Seguimos con nuestra nueva sección, repasando los mejores proyectos del básquet argentino. Hoy, aquellos nacidos en 1999.
Luego de repasar la talentosa clase 1998, continuamos con nuestra nueva sección denominada El Legado, en la que ponemos la lupa sobre los mejores proyectos del básquet argentino, en cada una de sus generaciones, con artículos y entrevistas. En este caso, realizamos un pantallazo sobre los nacidos en 1999, un grupo sin la profundidad de otros años, pero con algunos jugadores sumamente interesantes.
A diferencia de otras clases, en la 99 está muy en claro quien es el jugador con mayor proyección a futuro, además de también tener el mejor presente de sus contemporáneos: Lautaro López, base de 1,88 que actualmente se desempeña en la filial del Baskonia en la LEB Plata, promediando 11,3 puntos y 2 asistencias, luego de dar el salto europeo desde San Lorenzo durante el año pasado.
Hay varios factores que vuelven a López el mejor prospecto de la 99, tanto desde sus herramientas atléticas, como desde su talento técnico. El chaqueño es un jugador extremadamente creativo con el balón y capaz de regalar jugadas de lujo, además de tener una buena mano a media y larga distancia. ¿Para mejorar? Está claro que todavía debe seguir trabajando para fortalecer su físico y sobre todo, progresar en su toma de decisiones y conducción. Más allá de esto, no deja de ser un diamante en bruto, sobre el que Baskonia decidió apostar desde joven.
Detrás de López, la proyección todavía es algo más difusa, aunque hay valores para destacar. Uno de ellos es Cristian Cardo, un escolta de muy buena altura (2 metros), que además posee una de las mejores manos de todos los prospectos nacionales, cualquiera sea la generación de estos. Cardo está en una etapa de búsqueda de consolidación y aunque prácticamente no tiene minutos en Liga, se está destacando en la LDD al promediar 12,5 puntos y 5,4 rebotes, con un sensacional 44% en triples (15 de 34) para la talentosa cantera de San Lorenzo.
Un caso particular es el de Agustín Barreiro, otro perimetral de muy buena altura: juega de alero y mide 2,03. A diferencia de la mayoría de este grupo, Barreiro tuvo poco lugar en las diferentes selecciones formativas, pero ha tenido un progreso muy marcado en el último tiempo, siendo uno de los jugadores más productivo de toda la LDD. El joven de Boca está promediando 14,9 puntos, 7,8 rebotes y 1 tapa, con excelentes porcentajes de lanzamiento: 60% en dobles y 41% en triples. El oriundo de Cañuelas debe trabajar mucho en su físico, pero su combinación de altura, tiro y velocidad le da una versatilidad enorme.
En términos de juego interior, el proyecto de mayor nivel es Nicolás Franco, un pivote de 2,04 que juega en Peñarol. Franco tiene muy buenos números en la LDD (16 puntos, 8,3 rebotes, 51% en dobles y 41% en triples) y ha entendido que a diferencia de lo que hacía en categorías menores, ya no puede dominar exclusivamente con su buen juego de espaldas. Debido a esto, ha trabajado en su lanzamiento externo y aparece como uno de los mejores pivotes tiradores de toda la Liga de Desarrollo (13 de 32 en tiros de tres). Su perfil físico-atlético no es tan elevado, pero en términos de producción y presente, Franco sigue siendo de lo mejor de los 99.
El otro prospecto interior interesante de los 1999 es Juan Cruz Germano, de Boca Juniors. Germano es un caso completamente opuesto al de Franco, ya que su potencial pasa principalmente por el físico (mide 2,08) y por su dureza defensiva. Técnicamente sigue teniendo mucho por mejorar, incluso para el nivel LDD (promedia 1,5 puntos por partido allí), pero el potencial para trabajar está.
Volviendo al perímetro, otro caso con algunas similitudes al de Germano es el de Franco Alorda, de San Martín de Corrientes, un alero de 2,02 con buena capacidad atlética y física, pero que todavía debe mejorar técnicamente. Alorda lleva un tiempo haciendo la transición hacia las posiciones externas y aunque hoy su producción no es destacada (promedia 6,4 puntos en la LDD), tiene herramientas interesantes como para seguir progresando.
A su vez, entre los aleros también hay que mencionar al jugador de Peñarol, Juan Fernández, quien más allá de no ser tan alto para la posición (1,96), es un jugador muy fuerte físicamente, que ya ve algunos minutos en la Liga Nacional, además de ser rendidor a nivel LDD (9,4 puntos, 4,2 rebotes y 57% de cancha).
Por último, volvemos a la posición de base, donde por detrás de López, lo más interesante pasa por Agustín Pérez, un neuquino de 1,87 que actualmente juega la Liga Argentina con San Isidro, luego de tener varias temporadas destacadas en el Torneo Federal. Pérez ya promedia unos muy interesantes 5,8 puntos con el club cordobés, incluyendo un 37% en triples, donde recae su mayor virtud. ¿Otro de sus logros? Fue importante en el Neuquén campeón del Argentino de Mayores 2017, compartiendo la base con otro joven talentoso como Julián Ruiz, quien se llevó el MVP de aquella competencia.
Además de Pérez, tampoco podemos dejar de lado a dos extremos en términos de altura para la posición del uno: el desequilibrante Franco Baralle (1,77), quien ya ha tenido buenos momentos con Atenas en la Liga Nacional y a un proyecto como Alejo Orquín, quien con 1,95 juega en estos momentos en Unión Vecinal del Torneo Federal, todavía sin demasiada participación en cancha.