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Estaba claro que sumando las diferentes opciones que los Spurs tienen en esa posición, al bajo nivel mostrado por Tony Parker en los últimos años, iba a ser muy difícil que el francés continuara en la franquicia texana. Finalmente esa sensación quedó confirmada este viernes, con el fichaje de Parker en los Charlotte Hornets.

El base acordó un contrato por dos temporadas y 10 millones de dólares, en un equipo que apuesta por él para ser el relevo de Kemba Walker, la principal figura de la franquicia de Michael Jordan. Parker, de 36 años de edad, ya había dejado en claro que no contemplaba el retiro y que quería seguir jugando varios años más.

De esta forma, se llega al final de una era en San Antonio, con la salida de la segunda pata de un Big 3 que le dio al equipo cuatro anillos de campeón. Vale recordar que previamente se había retirado Tim Duncan, mientras que aún hay dudas sobre el futuro de Manu Ginóbili.

Parker jugó 17 temporadas en los Spurs, desde su llegada con apenas 19 años en la 2001/02. En ese período ganó cuatro títulos, fue elegido a seis All Star Games y ganó el MVP de las Finales 2007. El francés es el cuarto máximo anotador en la historia de San Antonio (18943), mientras que lidera en asistencias (6829) y está segundo en partidos jugados (1198).