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Por la 19° jornada de la Euroliga, el Real Madrid viajó hacia Podgorica para enfrentarse al Buducnost. Los locales plantearon una férrea defensa y permitieron que el Madrid convierta pocos tiros y se decline por intentar conseguir puntos desde el perímetro. También capitalizaron algunas pérdidas de los españoles para poder facturar y cerrar el cuarto en ventaja por 4 unidades.

En el período siguiente los blancos no levantaron cabeza. Pese al ingreso de los argentinos Campazzo y Deck, el volumen de juego ofensivo no aumentó. El cordobés estuvo errático de cara al cesto rival –0/3 en tiros de campo durante el cuarto–  como todo el Real Madrid, que veía como los locales se escapaban por 8 al cierre de la primera mitad.

El reinicio vio un atisbo de reacción por parte de los madrileños. Fabricaron mejores opciones de tiro, pero el Buducnost se mantuvo distante en el tanteador gracias a la aparición de sus perimetrales, que castigaron para sumar de a tres. Los locales llegaron a tener una diferencia de 15 puntos. El conjunto de Pablo Laso alternó buenas, se esforzó por capturar cada rebote, y malas, tuvo 5 pérdidas en el cuarto y 13 en lo que iba de partido; y el parcial del tercer chico fue de 20 a 20.

En el final, el Madrid logró achicar la distancia a 8 puntos (61-53) pero las diferencias en el juego eran claras. El equipo montenegrino mantuvo la concentración y se llevó una gran victoria ante el Madrid que llegaba segundo en la tabla de posiciones. Campazzo anotó 7 puntos, repartió 4 asistencias y capturó 2 rebotes en 24 minutos de juego, mientras que Deck participó durante 19 minutos, marcó 4 unidades y bajó 7 rebotes.