SEMIFINALES – CONFERENCIA NORTE
- Quimsa (Santiago del Estero) – Atenas (Córdoba)
. Horario: 21.00. TV: TyC Sports.
. Árbitros: Alejandro Ramallo, Rodrigo Castillo y Silvio Guzmán.
. Estadio: Ciudad.
. Historial: Atenas 28-19. Fase Regular 2014/15: Quimsa 90-66 y 81-76 (en Santiago); y 74-72 (en Córdoba). Atenas 67-60 (en Córdoba).
Las semifinales de la Conferencia Norte comenzarán con un partidazo entre dos serios candidatos. Quimsa, el mejor de la fase regular y uno de los dos equipos que logró barrer su serie de primera ronda, recibirá a Atenas, quien se quedó con el 4º de la zona pero tuvo unos meses finales en gran nivel.
La Fusión viene de despachar en la primera instancia a Sionista por un cómodo 3-0, en una serie que prácticamente no tuvo equivalencias: ganó los tres partidos por una media de 21 puntos de diferencia, anotando 89.7 de promedio.
Si bien el equipo de Paraná no suponía ser una gran oposición (fue el de peor récord en la Conferencia), los de Santander ratificaron sus credenciales, esas que lo llevaron a ser el conjunto más compacto, sólido y variado de la competencia. No por casualidad son la mejor defensa y el mejor ataque del torneo.
En esa costado ofensivo, sin embargo, los santiagueños tendrán que hacerle frente a una bajo más que importante, la de Diego García, quien sufrió un desgarro de 7 milímetros en el isquiotibial izquierdo que, en principio, lo sacará de los dos primeros encuentros de la serie, aunque corre riesgo su presencia en toda la eliminatoria. Se trata nada más y nada menos que del mayor referente en el ataque, quien promedia 15 puntos, 2.4 asistencias y 1.6 rebotes en la temporada.
De todas maneras, se sabe que Quimsa tiene varias armas importantes, como Nicolás Aguirre (12.4 tantos y 4.6 asistencias), Leonardo Mainoldi (11.7 y 5.3 recobres), Robert Battle (11.9 y 7.7) y Gabriel Deck (11.6 y 4.8), quienes puede cubrir la carga anotadora que aportaba García. También será momento, claro, para que Juan Fernández Chávez (7.4) y Lucas Pérez (7.3) den un paso al frente, ya que tendrán minutos cubriendo la baja del escolta.
Silvio Santander nos contó cuál era la mete global de su equipo: “Nosotros tenemos que tener una respuesta colectiva, tanto en defensa como en ataque, como lo venimos haciendo durante todo este año. La idea pasa por lograr imponer nuestra forma de jugar y estar bien preparados para cada uno de los partidos”. Aunque claro, sabe bien cuál es el foco principal: “Atenas es un equipo que anota casi 80 puntos de promedio. Tenemos que hacer un buen trabajo para poder bajarles esa media que traen hasta ahora”, blanqueó.
Claro, Quimsa tratará de hacerle frente a una de las mayores virtudes de los cordobeses, quienes tienen una media de 79.7 tantos por encuentro y cuentan con muchísimos recursos ofensivos: pueden lastimar de tres puntos; su juego interior, con Mikulas, Lo Grippo y Torres (promedian 30.8 puntos entre los tres), es uno de los mejores; Elsener (11.6 unidades), González (11.3) y Rivero (10.4) arman un perímetro peligroso; y por supuesto, Bruno Lábaque es el líder que maneja a todos.
El base es el termómetro de Atenas y tuvo una temporada en gran nivel. Sus promedios en la 2014/15 son de 12.8 tantos, 5.6 asistencias y 3.2 rebotes. En las tres victorias de la serie de cuartos de final frente a Estudiantes, levantó a 17.3, 7.3 y 5.6. Y en la única caída contra los de Concordia, bajó a sólo tres puntos y cuatro pases gol. Si Bruno está bien, el Griego se potencia y es de temer, porque al margen de los números su valor espiritual y de experiencia es superior al resto. De todas maneras, Miravet le dio a sus dirigidos un enorme sentido colectivo, y la confianza del grupo está por las nubes. Además, internamente querían enfrentarse ante la Fusión para demostrar que pueden pelear bien arriba.
Quimsa llega a esta serie con cinco victorias seguidas, y el último que le ganó fue justamente Atenas, quien se impuso en 24 de sus últimos 29 partidos, toda una muestra de la mejoría que tuvo el equipo desde la llegada del Zurdo, quien le sacó el jugo al potencial que prometía tener el plantel. Se enfrentan dos equipos largos, con calidad, experiencia y hambre de gloria. La mesa está servida para una serie más que interesante.
- San Martín (Corrientes) – La Unión (Formosa)
. Horario: 21.30. TV: LNB Contenidos.
. Árbitros: Fabricio Vito, Roberto Smith y Oscar Brítez.
. Estadio: El Gigante Rojinegro.
. Historial: Igualados 4-4. Fase Regular 2014/15: La Unión 66-53 y 77-74 (en Formosa). San Martín 100-92 y 94-91 (en Corrientes).
La otra serie semifinal de la Conferencia Norte tendrá en ella al protagonista de la mayor sorpresa de la primera ronda de los playoffs. Se trata de La Unión de Formosa, quien tras dejar en el camino nada más y nada menos que a Regatas se las verá contra San Martín, quien será local esta noche por tener la ventaja de localía.
Los correntinos vienen de dejar en el camino a Olímpico, en una serie que se definió por 3-1 y que tuvo muchísima paridad. Tal es así que de las tres victorias que logró, dos fueron por apenas un punto y la otra por dos. Los detalles terminaron de inclinar la balanza ante los de La Banda, pero quedó claro que el Santo tuvo mayor temple, carácter y jerarquía para llevar la historia a su favor.
Ya sin James Williams, quien dejó el equipo antes del inicio de los playoffs, el conjunto de Sebastián González demostró que su capacidad ofensiva puede ser de temer. En los cuartos de final promedió 86.7 puntos por encuentro, subiendo bastante su marca de la fase regular (79.7). Y claro, este factor se puede acrecentar en esta eliminatoria, ya que La Unión es el segundo que más puntos recibió en fase regular (85.2 por juego) y, si bien demostró una mejoría en la postemporada, se sabe que el aspecto defensivo no es su mayor fuerte.
Individualmente, los correntinos tiene mucho poder de gol y calidad. Sus dos extranjeros son, quizá, las piezas más importantes. Jeremiah Wood fue una pesadilla para Olímpico en los cuartos de final (21 puntos, 10.8 rebotes y 3 asistencias de promedio); mientras que John De Groat castigó con 18.8 tantos de media y se sabe lo peligroso que puede ser con su variado arsenal.
Los otros titulares son los que sostienen la estructura: Matías Lescano (15.3 puntos y 5.8 rebotes en los cuartos), Diego Ciorciari (12.5 y 4.3 asistencias) y Miguel Gerlero (11 y 4 recobres). El banco, en cambio, se presenta no tan poderoso, aunque los formoseños tienen una rotación aún más corta. De todas maneras, Bolívar, Iglesias y Calvi pueden ofrecer respuestas para los correntinos cuando se les necesita.
La Unión, decíamos, viene de dar el gran golpe. Claro, llegó a los playoffs después de un año con muchísimas complicaciones que lo dejaron en el 7º lugar de la Conferencia, pero se las ingenió para dejar en el camino a un candidato de la talla de Regatas, a quien superó 3-1 y lo hizo con total autoridad.
El conjunto de Fabio Demti se afianzó en la parte final de la fase regular (ganó siete de sus últimos nueve) y ratificó en los playoffs esa mejoría. Demostró que tiene armas para lastimar en ataque (79 puntos de promedio), pero el termómetro parece ser la defensa, aspecto que si consigue imponer hace que el equipo se transforme en un gran problema para cualquiera. De haber recibido 85.2 puntos de promedio en la regular, La Unión bajó esa marca a 78.5 en los cuartos de final, muy meritorio además por el rival. Regatas era uno de los conjuntos más profundos y con mayores recursos de la competencia, así que hay confianza para poder frente a San Martín.
El aspecto ofensivo es la parte que mejor le sale a los formoseños. Cuando logran imponer su propio ritmo de juego, dominan. Y para ello, es fundamental Javier Martínez, el líder por experiencia y sabiduría en estas instancias. El base paraguayo promedió 13.5 puntos, 4.8 rebotes y 3.8 asistencias en la fase previa, marcando claras diferencias cuando se lo propuso pese a sufrir una intensa defensa de parte de Pablo Espinoza.
Al margen del base, La Unión confía en lo que puede hacer Winsome Frazier, su goleador (viene de anotar 19 tantos por encuentro ante el Fantasma); Fernando Martina, quien se alimenta del pick and roll con Martínez y suma siempre, también atrás (15.8 tantos y 7.5 recobres); y Facundo Piñero (11.5 y 3), quien pasó a ser aún más importante ante la lesión de Justin Dobbins, afuera del resto de la temporada por su rotura en el tendón rotuliano de la rodilla izquierda. Mc Gowan es quien completa el quinteto inicial, aunque tiene que dar un salto y explotar sus conocidas capacidades ofensivas, ya que viene de tener una media de 6.8 tantos (33.3% en dobles, 10% en triples) en la llave contra Regatas.
El punto flojo, quizás, es la escasa rotación. Matías Ibarra (7.3 puntos, 3 rebotes y 2.3 asistencias) y Pablo Barrios (2.8 y 2 recobres) son los habituales relevos, con algún ingreso ocasional de Barroso y Mora. La carga de minutos y el desgaste puede ser un factor a tener en cuenta, aunque como nos dijo el Lata Ibarra, “tener una rotación corta también hace que más jugadores estén en un nivel de confianza superior”. La Unión encontró su camino y su plantel confía en sus chances. Y además de haber encontrado el juego, tiene experiencia y carácter de sobra.
San Martín llega a esta serie con un invicto de 14 partidos jugando en su casa (la última derrota fue el 17/2, contra Bahía Basket). Allí construyó una fortaleza y se siente muy cómodo. La Unión, por su parte, viene de dar un golpe que alimentó su confianza de gran manera. Y lo hizo justamente ganando dos partidos en Corrientes, donde Regatas era casi invencible. Y claro, lejos está de sentirse conforme. ¿Podrá repetir la historia?