DeAndre Jordan y la volcada más salvaje de la historia
14:49 21/07/2020 | En el día de su cumpleaños número 32, recordamos una acción suya de 2013 que fue considerada por la liga como una de las mejores de la década.
Durante sus años más sustanciosos, DeAndre Jordan se destacó por ser uno de los pivotes más atléticos y dominantes en la pintura que tuvo la NBA. Su facilidad para estremecer los aros lo hizo un componente vital de aquellos Los Ángeles Clippers de Chris Paul y Blake Griffin que se consolidaron como un equipo de playoffs en la Conferencia Oeste. Pero, indudablemente, una de sus tantas volcadas define todo eso a la perfección.
Sucedió en 2013, en un encuentro entre la franquicia angelina y los Detroit Pistons. Durante el segundo cuarto, él y Paul reprodujeron una jugada que caracterizaba a ese equipo dirigido por Doc Rivers: el famoso alley-oop, en el que el base colgaba la pelota cerca del aro para que el interno o Griffin definiera. Por mucho que los rivales supieran de ello y diagramaran formas de frenarlo, resultaba bastante complicado hacerlo. Entonces, se dio la acción: Jordan recibió la asistencia un poco alejado del canasto y con Brandon Knight enfrente, pero se las arregló para impulsar su cuerpo y volcarla ferozmente sobre la humanidad del base.
Con el perimetral en el piso, el banquillo entero de los Clippers entró a festejar el movimiento de su compañero. Un grupo de niños, situados en las primeras filas del estadio de los Pistons, comenzó a gritar de forma alocada por lo ocurrido a pesar de que semejante demostración de potencia le había jugado en contra a su equipo. El partido terminó con paliza de los de Los Ángeles por 129-97, pero el resultado quedó en segundo plano. En un momento en el que las redes sociales ya comenzaban a ser el centro de la escena, el mundo NBA replicó en Twitter aquel vuelo. Hasta el propio Knight lo hizo.
It wasn't in the scouting reports that the clippers threw lobs lol
— Brandon Knight (@Goodknight11) March 11, 2013
Si bien es cierto que Jordan volvió a protagonizar volcadas de ese estilo, también lo es que ninguna causó el revuelo que esa generó. La liga la nombró como la mejor del año y, recientemente, como la más brillante de toda la década. Un símbolo de lo que significaba ese conjunto, que nunca pudo ganar un campeonato pero que maravilló a todos por ese tipo de exhibiciones.