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Saco oscuro y camisa blanca, al lado de Tony Parker y Patty Mills, ambos lesionados, Manu Ginóbili observó la paliza sobre Minnesota, también debilitado por las ausencias de los lesionados Ricky Rubio, Kevin Martin, Nikola Pekovic y Mo Williams. Fue la quinta derrota seguida de los Timberwolves, que tienen un fututo bastante negro.

Es la segunda vez que Manu falta a un partido en esta temporada por decisión del DT Gregg Popovich para cuidar el físico del bahiense. El anterior se lo anotó ante Houston Rockets, de visitante, cuando perdieron 98-81. Esa noche tampoco jugó Tim Duncan.

Marco Belinelli fue el gran anotador del choque: terminó con 20 puntos, incluyendo 4-5 triples. Tim Duncan, tal su costumbre hizo un doble-doble más para su estadística personal: 13 tantos y 10 rebotes, en 19 minutos.

Justamente frente a Minnesota, en el primer choque del calendario, los Spurs había anotado 121 puntos, que se mantenía como la máxima de la temporada. Frente al mismo rival la mejoraron y la llevaron a 123. También, los 31 puntos del primer cuarto, los 37 del segundo y los 68 combinados en el primer tiempo son ahora las marcas más altas de la franquicia en la 14/15.

El choque quedó definido en el primer cuarto. Ahí ya quedó clara la diferencia de personal y juego entre los dos equipos. El local estiró las ventajas a su antojo y tocó los +25 a los 34 minutos (95-70), que se repitió en la mitad del último cuarto. Ante un rival que ni siquiera se enojó por semejante paliza, a San Antonio se le hizo un paseo para que disfruten todos los jugadores disponibles.

Después del gran enojo de Popovich, en la derrota ante Brooklyn, por el bajo rendimiento y pobre entrega de la mayoría de los jugadores, el equipo respondió con dos triunfos seguidos para elevar el récord a 15-5 y mantenerse 5º en la Conferencia del Este, curiosamente el mismo saldo de triunfos y derrotas que el líder del Este, Toronto Raptors.

La próxima cita para los Spurs será el martes, de visitante, ante Utah Jazz, que al cierre de la jornada del sábado arrastraba una racha negativa de 8 derrotas, la segunda peor después de Detroit Pistons (-11).