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Con el primer match point de la serie a su favor, podríamos resumir el encuentro de los Rockets ante OKC diciendo que Houston hizo todo mal en el cierre y Chris Paul todo bien, y que por eso el encuentro quedó en manos del Thunder y habrá séptimo partido el miércoles para definir al semifinalista del Oeste. Fue 104-100 en un partido con muchos errores pero tremendamente emotivo. 

Los Rockets tuvieron varias caras en el juego, la mayoría malas, aunque por momentos le salía el plan que viene llevando a cabo de toda la temporada y una seguidilla de aciertos le permitía avanzar, como en el comienzo del tercer cuarto, cuando sacó 8 de luz con una ráfaga de Westbrook. Pero entre la inestabilidad de Houston y una mejoría de OKC, el trámite se volcó al lado opuesto y OKC pasó a ganar 88-80 en el último cuarto, dando toda la sensación de que iba quebrar el juego. 

Fue entonces que Houston tuvo esos picos en los que nadie puede frenarlo, con Covington mostrando su categoría, en este caso para anotar, ayudando a su equipo a clavar un parcial de 14-3 para pasar al frente 94-91. Un par de minutos más tarde, el tablero mostraba 98-92 para Houston. Restaban 4m19s.

De ahí hasta el final, fue todo de Chris Paul. Primero metió dos bombas para empatar en 98 apenas un minuto después de ese 98-92, y después metió los 2 libres decisivos para darle a OKC el 102-100 a 13s del final. Houston hizo todo mal en ese mismo período, sobre todo por el lado de Westbrook, que falló tiros increíbles, dio pases a nadie y perdió pelotas clave. Un espanto. Harden, insólitamente, casi no tiró al cesto en esos 3 minutos finales fatales de Houston. Ahora, tras el 100-104, deberá ver si puede retomar el camino que lo llevó al triunfo en el juego 5 y que hoy no mostró en ningún momento. Paul terminó con 28 puntos y Gallinari con 25. En Houston, Harden sumó 32. 

Boxscore oficial del partido