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La noche de domingo de Jimmy Butler en llamas no pasó para nada inadvertida. En el partido que Chicago le ganó a Toronto, a domicilio y por un apretadísimo 115-113, la figura de los Bulls rompió un récord y se convirtió en el jugador que más puntos anotó en un tiempo (sea la primera o segunda mitad de un juego) dentro de la historia de la franquicia.

Lo de Butler ha sido sencillamente sensacional. Durante la primera mitad el escolta prácticamente no apareció y anotó solo 2 puntos, pero en el complemento fue una máquina y terminó el duelo con 42 tantos. La increíble cifra de 40 puntos en la segunda mitad rompieron la marca histórica que había logrado Michael Jordan.

Su Majestad, que ostentaba el anterior récord, había encestado 39 puntos frente a Milwaukee Bucks el 16 de febrero de 1988. Casi 28 años después, Butler superó al astro con una labor de película.

Durante los dos últimos cuartos, Butler también contó con altísima efectividad encestando 14/19 tiros de campo (además sumó 10/11 en libres). Si tomamos esa medida con el pobre registro de 1/4 de cancha en el primer tiempo, está claro que la transformación del jugador de una mitad a otra fue notoria.

La importancia de Butler fue totalmente decisiva para que Chicago le diese vuelta un partido durísimo a Toronto, en una jornada donde los Bulls llegaron a estar diez unidades abajo en más de una oportunidad. Gracias a su bestial trabajo, los de Illinois hilvanaron su cuarta victoria al hilo y se subieron al segundo lugar del Este.