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Boca 88 - San Martín de Corrientes 81
Boca le puso un broche magnífico a su último partido del año derrotando 88-81 a un pesado como San Martín. El Xeneize cortó una racha de cuatro derrotas consecutivas para volver a la victoria después de desplegar un juego bárbaro durante la primera mitad de la noche para después aguantar (con mucho sudor) la reacción correntina. Fotis Lampropoulos fue el máximo anotador y la figura con un doble doble de 20 puntos y 10 rebotes, sin olvidar otros grandes aportes como los de Adrián Boccia (16 tantos) y Eduardo Vasirani (15 puntos y 11 rebotes).
Mientras Rey García comenzó a carburar la máquina en el goleo rojinegro, Boca de a poco empezó a encontrar una grieta más que interesante de la mano del ataque de Boccia y la potencia de Lampropoulos en el juego interior. Vasirani también fue muy importante en el juego local, aunque lo mejor pasó por lo colectivo y la buena defensa sobre un San Martín opacado. Si bien durante la mayor parte del primer parcial no se marcaron diferencias en el tanteador (a pesar de que en el juego era más estable el anfitrión), en los últimos minutos Boca metió una carrera de 12 a 2 para escaparse a un claro 26-14, sacando una interesante ventaja.
La diferencia se sostuvo independientemente de que Boca envíe a sus relevos a la cancha. Con Sheard, Caffaro, Fierro y Gargallo en cancha, el Xeneize rotó el equipo pero mantuvo su buen momento. Llegó a tomar una rápida ventaja de 17 tantos (38-21), San Martín respondió de a ráfagas pero nada fue lo suficientemente peligroso como para alarmar a Boca. Por eso el local, con Boccia y Lampropoulos siendo constantes en el aporte ofensivo, se fue al descanso largo con un claro 48-34 sobre San Martín. Mejor parado, los del Lobito Fernández hicieron una gran primera mitad ante un rival que no se había terminado de enchufar.
San Martín mejoró notoriamente su cara en el reinicio de las acciones. A lo hecho por García se sumó un jugador clave como Aguerre y los triples empezaron a aparecer. Si el tiro exterior funciona, es sabido que San Martín puede cambiar el juego en cuestión de minutos. Treise estuvo más correcto desde el armado y Wood también dio su habitual cuota de peso en el juego interior, por lo que en un ratito los de Sebastián González transformaron drásticamente el juego y se pusieron a dos de la remontada (56-54). El juego se pinchó tras aquella embestida y a ambos les costó pesar demasiado, pero Boca lo cerró mejor gracias a dos muy buenos triples de Gamboa y el pibe Caballero (66-60). Aún así, San Martín ya estaba de vuelta en el partido y prometía dar mayor batalla en la recta final.
Y justamente Keenan (otro de los que creció) permitió que San Martín tome la delantera en el marcador apenas iniciado el último periodo: 68-66 en un minuto. Y ahí llegaron las apuestas más conocidas, los protagonistas más claros en los momentos calientes. Rey García, Wood, Keenan y todo ese repertorio peligrosísimo de los correntinos, y Lampropoulos, Boccia y Vasirani en el costado local. Boca no aflojó y se mantuvo al frente, aguantando toda la arremetida rojinegra. Lescano le dio vida a la remontada santa con un bombazo, pero Lucas Pérez respondió con un triple clave restando 29s para el cierre y dejando a Boca arriba por cuatro (84-80). Ese tiro de Pérez definió la noche, porque luego el Xeneize aguantó y se aseguró un triunfo muy sufrido para cerrar el 2017.