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Uno juega de ala y el otro de guardia. El primero tiene 22 años y el segundo 23. No se parecen en otras cuestiones, pero sí en el hecho de que ambos están aprovechando al máximo los minutos que le está dando Silvio Santander en San Lorenzo. 

Intensidad, eficiencia y personalidad son las tres características en las que también son similares y vienen dándole soluciones al esquema azulgrana desde que arrancó la temporada 2020/21 de la Liga Nacional.

Un párrafo y todavía no se conocieron los nombres. Sus rendimientos son tan altos que saber quiénes son por como sus padres los inscribieron en el registro civil. Sin más protocolos, los protagonistas son Leandro Cerminato y Santiago Ferreyra.

El primero de los involucrados impresiona desde su físico. Mide 2.01 metros y es capaz de hacer de todo un poco en ambos costados de la cancha, con buena envergadura y posicionamiento para capturar rebotes y conseguir segundas oportunidades. Además, corre bien la cancha y esto le permite promediar 4.6 puntos y 4.0 atrapes durante los 13.7 minutos que se encuentra en cancha (siete partidos). 

El segundo posee una mano bárbara y lo demostró en estas últimas presentaciones. Viene de hacer una muy buena temporada en la Liga Argentina, donde registró promedios de 12,1 puntos, 2 asistencias, 3,5 rebotes y 11,1 de valoración en 23,6 minutos durante 30 partidos. En la 2019/20 había lanzado al 45.8% de tres y en la actualidad esos valores crecieron hasta el 48.0%. Desde el catch and shoot es letal y puede convertir tanto en transición como en el juego estacionado. 

Material hay y la ilusión está como un volcán en ebullición. Puntos, capacidad, talento y determinación bajo el manto de un entrenador que sabe trabajar con esa clase de gemas. Presten atención, ahora sí, escucharán sus nombres con decisión.

Ignacio Miranda/ [email protected]
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