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Lo de la burbuja de Orlando en la NBA fue un éxito y en parte se debe mucho a que los protocolos fueron cumplidos a raja tabla y casi todos los protagonistas permanecían en su habitación el tiempo en el que no estaban entrenando o jugando.

En el Hotel Gran Destino donde se alojaban todos los equipos cabeza de serie, existió la particularidad en el que se cruzaron de arriba hacia abajo un general manager con su antiguo jugador, vistiendo en la burbuja la casaca de otro equipo. La historia se trató de Masai Ujiri, general manager de los Raptors afincando en la habitación número 950 y Kawhi Leonard, jugador estrella de Los Angeles Clippers, descansando en su cuarto número 850.

Cada individuo tiene su rutina diaria si se trata de ejercicios físicos y horarios también, en el caso de Masai Ujiri, su trabajo físico se da con el despertar a las 5 AM, una hora en el que la mayoría de los jugadores de NBA, si es que no tuvieron una noche de salida, están durmiendo menos Kawhi que fue sorprendido por los ejercicios de su antiguo jefe en el piso de arriba.

Según contó la periodista Taylor Rooks, Ujiri estuvo realizando sus ejercicios matinales durante varias semanas con suma tranquilidad, horas previas antes del desayuno, pero un día recibió un mensaje en su teléfono que decía: “Buenos días Jefe ¿Todo bien ahí arriba?” y era nada y nada menos que Kawhi Leonard, su exestrella que jugó una sola temporada para los Raptors pero que le valió un anillo yque andaba con intenciones de que Masai aborte su rutina matinal en pos de la buena relación que tenían.

De manera chistosa Ujiri le respondió que se detendría con sus ruidos por el momento, pero que los retomaría con mayor intensidad cuando Toronto se enfrentara a los Clippers en la finales, a lo que el ex Spurs retrucó con un “¿Conoces el dicho no despiertes al oso? Voy a llamar a la NBA a pedir por tí y que te expulsen de la burbuja", manifestó entre risas el siempre parco Leonard.