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Los Warriors ganaron anoche en el TD Garden, un partido harto complicado en el que estuvieron abajo buena parte del juego, pero que a partir de la presencia de Stephen Curry pudieron darlo vuelta, empatar la serie y evitar quedar con la espalda contra la pared.

Con la serie igualada, los Warriors recuperan la localía y la confianza para despejar el camino al título. Sin embargo hay una pieza que todavía está en el debe, que extrañamente no puede encontrarse en el juego y ese es Draymond Green, un jugador con un IQ lo suficientemente alto para entender rápidamente lo que el equipo necesita.

En esta serie estuvo más abocado a pelear que a jugar y al parecer parece fuera de foco, sobre todo cuando se trata de intentos al aro, donde generalmente no hace muchos, pero nunca estuvo con unos promedios tan bajos como en estas finales (23% en cancha y 0/9 en triples), arrojando 4.3 puntos por encuentro.

Anoche perdió la defensa un par de veces y eligió malos tiros, comprando lo que le daba la defensa de Boston y con ello las criticas o dudas aparecieron en las redes sociales. Muchos fans de los Warriors querían buscar respuestas del nivel de Draymond donde sea y acudieron a la madre de él, quien en un momento de superación exclamó por Twitter: “dejen de preguntarme que le pasa a Dray, ¡No lo sé!”.

Draymond estuvo enterado del asunto y fiel a su temperamento le bajo los decibeles a lo que se dice de su juego y enfatizó: “Vi a mi mamá tuitear que ha sido una serie difícil para mí”, dijo alegremente. Absolutamente, definitivamente lo está siendo. Pero estoy seguro de que tendré un desafío más difícil que este. Pero actualmente, tengo que resolver esto y lo haré. No tengo ninguna duda en mi mente de que lo haré, siempre lo hago”.