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En la época que jugó Kobe Bryant no hay muchos jugadores, por decir ninguno que en algún momento de enfrentarlo, Black Mamba no lo haya amargado. Su poder de fuego, su capacidad goleadora era superior a la defensa que le plantearan, prácticamente todo quedaba supeditado a cómo se levanta la estrella angelina.

Andrés Nocioni no tiene los mejores recuerdos de su temporada y media con Sacramento, siempre lo marca como uno de sus puntos más bajos de su carrera por el hecho de no estar cómodo en el equipo. En su segundo año con los Kings, un primero de enero le tocó viajar a Los Ángleles, al Staplees Center para enfrentar a Kobe y compañía. Fue un partido muy parejo que Sacramento lo tenía en el bolsillo, un punto arriba y dos libres para sacar  tres de distancia con 4 segundos por jugar.

Ime Udoka, actual entrenador de los Celtics, metió uno de dos y el marcador quedó apretado 108-106 para los Kings. Chapu estaba en el banco, había jugado solo diez minutos con 1/5 en cancha y tres rebotes, muy poco para lo que él espera de sí mismo y del rol que le daban. Volviendo al final del juego, Sacramento hizo todo mal en la defensa y Kobe se sacó la marca de encima literal con un topetazo lícito y terminó lazando solo un triple desde la esquina, frente al banco visitante.

Obvio que entró y Nocioni lo recordó en su cuenta de Instagram “En días de tanta efeméride, les dejo una personal. Hoy se cumplen 12 años de esta foto. Triunfo de los lakers en la última bola, no hace falta decir quien tomó el tiro final…La expresión de mi cara lo dice todo

 

 

 

 

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Chapu en modos redes y riéndose de sí mismo, un coctel ganador a la altura de su carrera.