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Desde la salida del documental The Last Dance, Scottie Pippen siempre se mostró en desacuerdo con el producto final. La razón principal radica en lo centrada que está en la figura de Michael Jordan, mientras que deja de lado a muchos compañeros que tuvieron un lugar importante en la historia.

En su libro, próximo a salir, el exjugador expresa: “Los dos últimos episodios se emitieron el 17 de mayo.Al igual que los ocho anteriores, glorificaron a Michael Jordan sin elogiarme ni a mí ni a mis orgullosos compañeros de equipo. Michael merecía una gran parte de la culpa. Los productores le habían otorgado el control editorial del producto final. El documento no podría haber sido publicado de otra manera. Él era el protagonista y el director”.

Además, Pippen hasta evaluó el segundo capítulo, que habla de su propia vida: “Incluso en el segundo episodio, que se centró durante un tiempo en mi difícil educación y mi camino poco probable hacia la NBA, la narrativa volvió a MJ y su determinación de ganar. No era más que un accesorio. Su "mejor compañero de equipo de todos los tiempos", me llamó. No podría haber sido más condescendiente si lo hubiera intentado”.