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La primera temporada de Facundo Campazzo en la NBA y los Nuggets culminó hace unos trotes, pero el anochecer está tardando en caer y el sol sigue iluminando medianamente la relevancia que tuvo, con muchos puntos positivos y, obviamente, otros negativos.

En todo ese frenesí terminó siendo uno de los novatos más sólidos de la 2020/21 en ambos costados de la cancha, con equivocaciones propias del cambio de chip de Europa a Estados Unidos, pero con la experiencia que le otorgó su edad y su trayectoria en el Viejo Continente y Argentina.

A lo largo de la campaña regular, y con aún más énfasis en los playoffs, el cordobés se destacó en diferentes apartados y se caracterizó por hacer un poco de todo, teniendo la oportunidad que no muchos rookies consiguen en su primer año en la liga: ser titular en un equipo con aspiraciones de postemporada.

La lesión de Jamal Murray fue el atenuante y Campazzo hizo del contratiempo una solución, con algunas luchas y otras victorias en el camino, en un equipo que llegó hasta la anteúltima instancia de la Conferencia Oeste.

Empezando en la temporada regular, el exjugador de Municipal, Peñarol, Murcia y Real Madrid se mostró sólido en su principal cualidad: la habilidad para alimentar a sus compañeros.

Por ejemplo, solo LaMelo Ball (313) y Tyrese Haliburton (309), picks dos y 12 del último Draft, consiguieron más asistencias totales que Campazzo (232) en la campaña regular 2020/21, lo que refleja la tarea del argentino a la hora de generar.

Efectividad, también lujos, pases de fantasía y una adaptabilidad en su rol de asistidor clara que le permitió ser uno de los novatos más seguros, con un ratio de asistencias pérdidas de 3,1 que fue el tercero mejor entre los rookies de su camada si se tienen en cuenta los que promediaron 20 o más minutos en cancha.

Por otro lado, en defensa también dejó en claro lo que puede producir, con ese instinto adquirido a lo largo de los años y su explosividad de siempre. Le costó con la presión y las faltas, pero no por eso dejó de producir, siendo el sexto más destacado de los novatos en victorias compartidas por su defensa con 0,076.

Velocidad de pies, agilidad en los desplazamientos, lectura y disciplina fueron los condimentos que crearon un caldo que por momentos era una pintura al óleo, llegando a marcar a los cinco jugadores en una posesión, como lo hizo en este partido ante Brooklyn.

 ¡¡¡LA DEFENSA DE FACU CAMPAZZO!!! #MileHighBasketball pic.twitter.com/4bmThZ9WBE

— NBA Latam (@NBALatam) May 9, 2021

A su vez, si hubo un aspecto en el que dominó por antonomasia fue en las deflections, esa estadística que premia los momentos en los que en cualquier lugar de la cancha un defensor hace que la pelota vaya en una dirección diferente a la que pretendía el jugador ofensivo.

Allí Campazzo directamente no tuvo oposición y fue el mejor novato de la temporada regular en desvíos totales (176) y el tercero más destacado en promedio (3,1). Pudo agacharse, molestar con las manos, desplazarse con celeridad y esa gran diferenciación, que le da la chance de tener ajustes finos de motricidad, precisos al 100% y combinando reacción, potencia y fuerza acíclica.

En playoffs el patrón continuó de la misma manera, con el plus de un salto en su actividad como anotador. Con la ayuda de ser el novato que más partidos disputó en esta postemporada hasta el momento (diez juegos en total), el cordobés se mantiene como el rookie que más puntos (93), triples (19) y libres (16) anotó, mientras que también es el de mayor caudal en rebotes (30), asistencias (41), robos (14), pérdidas (15) y faltas (35).

Todo esto sumado a su buena efectividad como tirador, que cerró en un correcto 39,6% en triples que le permitió ser el sexto mejor de la camada en playoffs, con 19 tiros de tres anotados en 48 intentos.

En defensa, al contrario de lo que ocurrió en la temporada regular, no se destacó en tantos apartados, pero siguió intenso con los robos y los desvíos, siempre jugando a la media falta y sufriendo el criterio arbitral actual que tiende a favorecer al jugador ofensivo.

Fue el mejor rookie de los playoffs en robos en promedio (1,4) y porcentaje (42,4%), al igual que en desvíos, estadística que controló de principio a fin en la temporada y se despidió con 19 en total y 1,9 de media. 

Ojos, oídos, números, difícil caminar por el sendero contrario a esa premia que explicó un día Rich Cho, exgerente general de los Hornets y empleado actual de los Grizzlies. Las cifras avalan el progreso y la solidez que mostró Facundo entre los novatos que también disputaron su primera temporada en la NBA fue suficiente para que se pueda soñar con verlo en uno de los quintetos ideales de rookies de la 2020/21. 

Un poco de puntos, muchas asistencias y vasta defensa, Campazzo pintó su nuevo retazo y se llevó un gran pedazo de sensaciones, con un amplio margen de progreso por delante y el futuro, otra vez, a sus pies.

¿Cuál será su próximo revés? 

Ignacio Miranda/ [email protected]
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