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Como parte de la prometedora clase 2000, Francisco Farabello es uno de los bases del futuro en el básquet argentino. Y ahora finalizó una etapa como es su paso por la NCAA luego de la derrota de Creighton ante Tennessee en el March Madness.

Sin ir más lejos, gracias a la quinta temporada que le permitieron jugar por la suspendida en la 2019/20 por el Covid, terminó su carrera como el argentino con mayor cantidad de partidos en la competencia, sumando un total de 142.

Sus primeras tres campañas fueron en TCU, donde disputó 73 encuentros. Allí, la 2020/21, donde venía logrando sus mejores números como Sophomore, debió quedar afuera luego de solo 9 partidos por problemas cardíacos.

Desde allí se recuperó por completo y se estableció como un sexto hombre confiable, primero en la 2021/22 con TCU y luego en los últimos dos años con Creighton, donde logró con el equipo destacar en el March Madness. En los Blujays disputó un total de 69 encuentros.

En total se marcha con 19.5 minutos de media, con 3.9 puntos, 1.8 rebotes y 1.5 asistencias. No tanto por los números, Farabello fue importante en todos sus años universitarios desde la intensidad defensiva, estableciéndose como un confiable 3&D, actuando como doble base en muchos momentos de los partidos.

Será importante su primer paso profesional para seguir su adaptación. Es un perfil de jugador interesante, un base con buena altura, que siempre demostró su talento con la celeste y blanca y que habrá que seguir.