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Al igual que OKC, Indiana dio un paso clave y se puso 3-1 en la final del Este. Fue victoria para los Pacers por 130-121 ante los Knicks como local.

Tyrese Haliburton fue la enorme figura con 32 puntos, 12 rebotes, 15 asistencias y sin pérdidas, seguido por 30 de Pascal Siakam y 20 de Bennedict Mathurin. En los Knicks no alcanzaron los 31 puntos de Jalen Brunson, los 24 de Karl- Anthony Towns y los 22 de OG Anunoby.

De la mano de Haliburton, con 20 puntos, 9 rebotes y 10 asistencias, los Pacers mantuvieron el control del juego en la primera mitad. A su vez, tuvieron un 50% en triples y supieron sobreponerse en el golpe por golpe ante unos Knicks que tuvieron 16 de Brunson, 14 de Towns y 13 de Anunoby, para llegar al entretiempo arriba por 69-64.

Un 7-0 en los tres primeros minutos, a partir de una gran defensa para correr y anotar de contragolpe, le dio a los Pacers un doble dígito de ventaja. A partir de allí, con Haliburton a la cabeza y con buenos aportes de Mathurin y de Siakam, Indiana supo sostenerse arriba ante los embates de unos Knicks dependientes de Brunson y Towns, para cerrar el tercer cuarto al frente por 102-91.

Con un Siakam que creció completamente y con un gran aporte de Mathurin en pocos minutos desde la banca, los Pacers encontraron laderos ideales para un Haliburton que condujo por completo al equipo. A partir de allí, y con un gran trabajo defensivo que casi no dejó anotar a Brunson en el clutch, Indiana cerró el juego con solvencia y quedó a un paso de la final.

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