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El mal momento de Boston Celtics se evidencia tras su derrota en casa contra Atlanta Hawks (115-119), un golpe que los aleja aún más del liderato de la Conferencia Este. El equipo dirigido por Joe Mazzulla acumula un récord preocupante de 8-8 en los últimos 16 partidos, reflejo de una inestabilidad que afecta su identidad como contendientes al título. Si bien su plantilla cuenta con talento de sobra, los errores mentales y la inconsistencia están pasando factura en una temporada que prometía dominio.

Uno de los puntos más alarmantes ha sido la incapacidad de cerrar partidos ajustados. La reciente derrota contra los Hawks es un ejemplo claro: con ventaja al inicio del último cuarto y varias oportunidades para sentenciar, los Celtics no pudieron contener la reacción liderada por Trae Young. La estrella de Atlanta no solo anotó 28 puntos y repartió 11 asistencias, sino que forzó la prórroga con sangre fría en los momentos decisivos. Mientras tanto, figuras como Jayson Tatum y Jaylen Brown fallaron tiros clave, destacando un 9/34 colectivo en triples que evidenció la falta de eficacia en momentos críticos.

Joe Mazzulla ha intentado justificar esta etapa como una oportunidad de aprendizaje, destacando que “este es el momento divertido” para superar la adversidad. La falta de fluidez ofensiva y el abuso del tiro exterior sin resultados positivos plantean la necesidad de ajustes. En un balance que aún es bueno, 29-13, pero que alerta a futuro. Sobre todo con derrotas ante el 6º del Este, el 14º (Toronto), el 5º (Indiana), el 7º (Orlando), el 10º (Chicago) e incluso a la hora de los flashes con aquella derrota navideña ante Philadelphia (hoy 11º del Este).

Con los Cavaliers consolidándose en la cima del Este y los Celtics cayendo a 6,5 juegos del primer lugar, el panorama para Boston se complica. Si bien es prematuro hablar de una crisis irreversible, los números no mienten: la falta de consistencia y los errores en la ejecución están minando las aspiraciones del equipo. Los próximos encuentros serán cruciales para determinar si este grupo puede reencontrarse con su mejor versión o si los problemas actuales son un indicio de algo más profundo.

Pablo Catalá / [email protected] 
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